Darwin dijo alguna vez que el ser vivo se adaptaba a su medio en pos de su supervivencia. Es decir, sea, cual sea la circunstancia, animales y plantas tienen la capacidad de desarrollar habilidades, virtudes y cualidades (fisiológicas), que les permiten desenvolverse en el entorno a que pertenecen. ¿Alguna vez ha sufrido un problema al que, aun siendo bastante complejo, ha logrado darle solución? ¿Alguna vez se ha ido de casa, ha salido de su zona de confort? ¿No ha pensado que cuando se enfrenta a situaciones difíciles, suele desarrollar una serie de habilidades y virtudes que no conocía; dándole la razón a este célebre biólogo?
Usted y yo conocemos bien la respuesta a estas preguntas y a ello se le suele denominar: Capacidad de Adaptación. Es esa facultad de despertar zonas de su cerebro que, a causa de diferentes motivos, poco utiliza, pero que en situaciones de riesgo y alerta se despiertan, ofreciendo al ser mayor lucidez, agudeza, capacidad de solución, pensamiento estratégico y táctico, habilidad, agilidad; en fin.
Igual que usted, he visto a personas que viven la vida al máximo, en circunstancias que son sumamente complejas, pero viven, están ahí; y es porque su capacidad de adaptación les permite el sobrevivir en ese entorno.
Entre más complejo sea el escenario en que nos desenvolvemos, más capacidad de parte nuestra requerirá; y al final notaremos que, por el simple hecho de estar en un ambiente que nos exige más, nos hemos convertido en seres más fuertes y capaces; puesto que todo en nuestro cuerpo está diseñado para el logro. Manos, pies, cerebro, ojos, boca, etcétera; responderán siempre de la forma adecuada en la medida en que les exijas.
