A pesar de resultar ser de lo más atractivo y emocionante, los comienzos al crear nuestro propio negocio suelen presentar situaciones de lo más complicadas que a veces no sabemos que determinación tomar. Es por esto por lo que queremos ofrecerte una serie de consejos prácticos que puedes adoptar ante este tipo de adversidades.
Temor al fracaso: Esta sensación la tendremos posiblemente durante toda nuestra andadura como autónomos, pero no debemos tomarla como un factor amenazante sino como un motivador natural que nos impulse a continuar creciendo y desarrollando nuestros productos. El miedo al fracaso es una constante que si aprendemos a manejar a nuestro favor, podremos tomar decisiones correctas y muy bien planificadas.
Escasos ingresos: Durante los primeros meses de actividad es normal que tus ingresos sean inferiores a tus inversiones pero es lo más corriente, date tiempo a ti y a todos los usuarios que navegan por Internet en busca de servicios como los tuyos. Posicionar correctamente tu marca en los buscadores lleva tiempo y esfuerzo en mantener actualizados todos tus anuncios. Solo es cuestión de tiempo que tras un constante trabajo veas recompensado éste en forma de nuevos clientes.
El tiempo: Este factor es clave en el desarrollo de la empresa. Al principio es bien sabido que invertimos más tiempo pero una vez estamos en marcha, solemos descuidarlo más y eso lo sabemos. El principal temor que se nos puede plantear es la necesidad de conseguir más minutos de nuestro tiempo para invertirlos en mantener a flote el negocio. Existen infinidad de técnicas dedicadas a la organización de las 24 horas del día para que no tengamos que renunciar a nada. Otra opción que podrás contemplar si no vas a poder dedicarte 100% es delegar un pequeño espacio de tiempo en profesionales que sigan actualizando tu marca.
Conocimientos: A veces sentimos que desconocemos el mundo en el que nos estamos asentando y por miedo a fracasar, renunciamos a ofrecer un determinado tipo de servicios para el cliente. Esta situación tendremos que solucionarla mediante el consejo y asesoramiento de aquellos que llevan más tiempo en el sector, aunque debemos recordarte que si te inicias en un determinado campo, previamente te prepares para poder ofrecer un mínimo de garantías en tu trabajo, así como mantenerte actualizado constantemente ante las novedades que irán surgiendo.
A lo largo del comienzo pueden surgir otro tipo de temores como la inseguridad por lo que estamos haciendo, la incertidumbre sobre si nuestro servicio es fiable o no, etc. El único consejo que debemos tomar ante este tipo de problemas es mantener firme nuestra voluntad de seguir mejorando y realizar estudios por nuestra cuenta sobre las características y facilidades que posee la competencia más directa, solo así conseguiremos el éxito en los negocios que tanto añoramos.