¿Por que debo aprender a invertir mi dinero antes que guardarlo en un banco o gastarlo en juguetes costosos?
La prosperidad y el éxito financiero de cada individuo radica en la calidad de su educación financiera y no de la suerte o la casualidad como errónea y popularmente se ha pensado. Es por ello, que el 90% de la riqueza del mundo está en manos del 10% de la población, precisamente por que en tiempos como estos, la educación convencional nunca ha sido ni será el camino para crear activos o alcanzar la riqueza indiferente de nuestro nivel cultural, profesional u ocupacional.
Nos enfrentamos ante un sistema capitalista que cada cierto tiempo pasa por una crisis, economías que pasan por periodos de recesión y con cada uno de estos acontecimientos viene inevitablemente la erradicación de miles de puestos de trabajo. Por otro lado, las empresas cada día utilizan tecnologías que buscan recortar puestos de trabajo para reducir costos, exigen a sus empleados mayor productividad frente a salarios cada vez más bajos u ofrecen condiciones laborales de contratación poco ventajosas, lo que nos lleva a desafiar el paradigma del trabajo fijo, trabajo seguro y el ascenso en la «escala corporativa»: las reglas económicas y laborales de hoy ya no son como las de ayer.
Ante un sistema económico dinámico, el sistema de hoy exige al individuo ser altamente competitivo en temas financieros por que la posibilidad de un solo ingreso en el hogar ya no es suficiente. La educación financiera no es física cuántica, un tema excluyente, elitista, algo extremadamente complicado, o como popularmente se ha pensado que la educación financiera es un tema solamente de personas adineradas, empresarios o industriales y que si no hacemos parte de este «pequeño» grupo no existe posibilidad de cambiar nuestra realidad económica; nada más que pretextos de nuestra parte… la educación financiera es simplemente una área de la educación que muy pocos hemos decidido explorar y que por consiguiente a falta de ella reducimos nuestra capacidad para crear activos y generar riqueza de forma independiente.
El mejor camino para cambiar nuestra realidad financiera es desear que definitivamente haya cambios y para ello debemos tomar la decisión de educarnos correctamente y si no lo hacemos en la dirección correcta jamás llegarán esos cambios tan deseados o esperados.
Finalmente, si decidiéramos retrasar la gratificación y en vez de comprar celulares costosos (por ej.) que a la vuelta de un año ya están obsoletos y al venderlos nadie da nada por ellos o tomamos ese dinero o el que tenemos en el banco acumulando polvo o perdiendo valor cada día (si es que lo tenemos) y mejor invertimos en nuestra educación financiera, vamos a poder crear verdaderos activos que me van a generar flujos de efectivo para finalmente poder satisfacer mis caprichos más locos a partir de un dinero que ya no sólo me sobra sino que no necesito para sobrevivir.
FABIAN A. VALENCIA
CEO, www.v-i-market.com