Tener un sueño no es lo mismo que tener un objetivo. Existen algunas diferencias que hacen la diferencia. Y esas diferencias son las que te permiten o no cumplir tus objetivos.
¿Qué son los sueños? Son deseos a largo plazo, algo que pensamos que algún día sucederá, son lejanos para nosotros, solo decimos: “algún día….”, soñamos con eso, por solo soñamos…no existe un compromiso real para realizarlo.
¿Y los objetivos? Un objetivo es un sueño con piernas.
El Coaching ayuda a expresar lo que la persona quiere, a tener buenos sueños, a ponerles piernas y a correr con ellos. Los objetivos son los sueños pero enunciados en forma más específica, con una fecha de realización y un plan de acción para lograrlos.
Los objetivos son nuestra brújula.
¿Sabes lo que no quieres, pero sabes lo que si quieres?
Es importante que tengas objetivos claros y que estén bien definidos, gracias a los objetivos avanzas.
Cuando una situación o un lugar ya no te satisface te mueves hacia algo mejor. Pero si no sabes dónde quieres ir, cualquier cosa que hagas o a cualquier lado que vayas va a estar bien, pero no va a ser donde tú quieras estar. Es como tener ganas de ir al teatro pero decirle al conductor de un taxi, no quiero ir al cine, tampoco a un restaurante, menos a una discoteca y esperar que te lleve. Es verdad, le estás diciendo donde no quieres ir, pero ¿sabes dónde si quieres ir? Tu cerebro es el conductor del taxi, dile claramente donde quieres ir.
Cuando definas un objetivo, éste debe motivarte, darte ganas de ir tras él, puede producirte miedo o temor, pero utilízalo de combustible para ir tras tu meta.
Cuando te centras en tu objetivo y toda tu atención está en él, también lo estará tu energía. Si no tienes el objetivo bien definido tu energía se dispersará y no tendrás los resultados que deberías haber tenido. Puedes esforzarte mucho, poner mucha energía pero si trabajas sin un objetivo claro, te sentirás mal, frustrado, el trabajo se tornará pesado y hasta puede afectarte la salud.
Cuando te centras en un objetivo y toda tu atención está en él, también lo estará tu energía. Si no tienes el objetivo bien definido tu energía se dispersará y no tendrás los resultados que deberías haber tenido. Puedes esforzarte mucho, poner mucha energía pero si trabajas sin un objetivo claro, te sentirás mal, frustrado, el trabajo se tornará pesado y hasta puede afectarte la salud.
¿Qué ingredientes debe tener un objetivo? Un objetivo, éste debe motivarte, darte ganas de ir tras él, puede producirte miedo o temor, pero utilízalo de combustible para ir tras tu meta.
#1 – Transformar tu sueño en objetivo.
Escribe tu sueño de una forma detallada y lo más concreta posible. Describe lo que quieres lograr.
#2 – ¿Este objetivo depende solo de ti? Solo tú puedes lograr tu meta.
#3 – ¿Cuándo lo quieres lograr? Pon un límite de tiempo para realizarlo.
#4 – Haz una lista de recursos. ¿Quiénes te pueden ayudar o que cosas necesitas para alcanzar tu meta?
#5 – Realiza tu plan de acción, éste será tu hoja de ruta. ¿Cuál es el primer paso que tendrás que realizar para ir hacia tu objetivo? ¿Y el siguiente? Escribe todos los pasos que necesites hacer para transitar tu camino.
Te invito a que elijas un sueño que tengas relacionado a tu emprendimiento, conviértelo en objetivo y sigue los 5 pasos para planificar su logro.
¿Te gustaría superar tus miedos, inseguridades y los pensamientos que te están impidiendo el éxito? Te invito a que conozcas Coaching de Impulso.
Nancy Pellegrineschi – Creando Futuro www.creandofuturocoaching.com