El trabajo es salud entretanto sea buen trabajo. Sin duda quiero trabajar, hacerlo sobre lo que es mi pasión sería conseguir al requisito copioso al que cualquier empleado puede apetecer; sin embargo el recorrido a la hora de conseguirlo es posible tener muchas dificultades.
Cuando decida aceptar incursionar en lo que verdaderamente quiero trabajar, seguramente deba adentrarse en puestos diversos y haciendo tareas que no resulten enteramente de mi gusto. No es que lo que sostiene esta declaración es inexorable, aunque es lo habitual en casi todos aquellos casos.
Cuando decida finalmente acaecer al trabajo o sector en el que quiero trabajar, aquel que me apasiona, comenzare desde otros que con el término me lancen al querido. Por ejemplo, si mi anhelo es la medicina, y en el futuro quiero trabajar como doctor, comenzaré mi prueba en guardias, colaborando en un sanatorio, o en una sala de radiología. Quizá no sea exactamente mi ansia, pero es el rumbo que me llevará a ella.
No importa el grado siquiera la desigualdad que haya hasta la cresta de la pirámide en la compañía que me emplea, sino que esa vivencia me sirva cuando decida ir completando aquellos escalones hacia donde quiero llegar. No obstante puede pasar que el labor en el que quiero trabajar no se relacione con la alta dirección y trate de una particularidad.
Entrar como negociante en un negocio de indumentarias de usar no será bueno a mis intereses si en el horizonte quiero trabajar de abogado, pero sí quiero incursionar en el mundo de la moda, o en la demanda textil, a modo de ejemplo, ya que tendré inteligencia y noción sobre de la calidad, el público, aquellos precios y las inversiones en maneras sistemáticas que se manejan.
La combinación ideal cuando quiero actuar en lo que me apasiona es poder estar con los ingresos que me genere, sin depender de otras labores. No obstante esto va tener que ser visto continuamente conforme una trascendencia. En momentos en que empiece mi sendero hacia mi ansia, tendré que poseer bien en claro que no será leve; las primeras ideas que nacieron no frecuentan ser las más cómodas, por jornada, horarios, tareas e inclusive condiciones laborales.
Lo importante será pensar siempre a dónde quiero arribar, cuál es mi ambición, de qué quiero trabajar en mi vida. No llegaré a la cima de la colina tranquilamente, deberé escalar, y en muchos periodos apoyarme, hacer contactos, interactuar y alejarme de distintas personas; asimismo puede que tenga que durar un momento “parado” en algunas obligaciones. Pero lo indispensable será mantenerme en el espacio, ir agregando virtudes de forma inteligente (conocimientos, capacidad, talentos, etc.) y, por último, me encontrare cada vez más cerca de nuestra meta: ejercer en lo que me apasiona.