La tecnología digital, que una vez fue acusada de perjudicar a la industria musical, hoy en día empieza a considerarse como su salvadora, gracias al florecimiento de servicios de streaming como Spotify, Deezer o Mix Radio, que dan a los usuarios la posibilidad de llevar su música a cualquier lugar por medio de sus dispositivos móviles.
Además, muchos artistas independientes se han visto muy beneficiados con las opciones de software que existen en la actualidad para realizar producciones musicales de calidad a bajo coste, sin contar con el gran aporte que el big data aporta hoy en día a la industria musical para analizar tendencias y determinar los futuros éxitos de ventas.
Música a la carta.
Spotify surgió poco después de que Apple hiciera la presentación oficial de su primer smartphone. Ambas tecnologías han avanzado a pasos agigantados desde entonces.
Hoy en día Spotify cuenta ya con más de 40 millones de usuarios activos, de los cuales una cuarta parte están suscritos a la tarifa premium, que ofrece contenido de calidad libre de anuncios por unos 10€ al mes, dependiendo del país desde el que el usuario se suscribe.
Una de las razones por las que la compañía ha cosechado un gran éxito es la opción de escuchar música a la carta. Los usuarios eligen aquellas canciones que desean escuchas sin comprar el álbum entero. Además la gran base de datos de la que la aplicación dispone supera ya los 30 millones de canciones, por lo que cada usuario encontrará la música de su agrado en su bolsillo.
Nuevas opciones para artistas emergentes.
Para los artistas que empiezan, los servicios de streaming son de gran utilidad, pues ponen a su alcance la posibilidad de llegar a millones de usuarios sin realizar grandes inversiones de dinero en publicidad. Pero existen otras aplicaciones en el mercado que son muy útiles para estos artistas a la hora de producir música de buena calidad sin depender de una productora o de alquilar un estudio de grabación.
Gracias al desarrollo de una gran cantidad de aplicaciones tanto para ordenadores como para dispositivos móviles, la opción de producir música de calidad de forma independiente y a un bajo coste llega a todos aquellos que están interesados en dar los primeros pasos con una maqueta bien preparada que pueda abrirle las puertas de la industria musical. Estos programas están pensados para componer todo tipo de música y existen opciones especializadas para cada estilo, desde un cantante de pop, hasta un DJ que quiera preparar sus pistas para promocionarse en Internet utilizando las distintas aplicaciones de streaming.
EL big data entra en la industria musical
Las nuevas tecnologías no sólo representan un gran beneficio para los artistas independientes y para los usuarios que disfrutan de los servicios de streaming, sino que también han aportado a la industria musical grandes avances que le permite estar a la vanguardia de las tendencias musicales a nivel mundial.
Esto es posible gracias a las redes sociales y al big data. La velocidad de análisis de estadísticas y datos recopilados a través de lo que los usuarios comparten en Internet hace posible que las empresas musicales analicen y determinen, no sólo cuáles son las canciones y los estilos de moda en el momento presente, sino también que elaboren predicciones sobre aquellos que se impondrán en el futuro próximo, lo que le facilita la elaboración de una oferta musical adaptada a los usuarios y a cada entorno con una inversión mínima, ahorrando costes y permitiendo a las empresas optimizar su oferta y mejorar sus beneficios.
Las nuevas tecnologías han representado un cambio de paradigma para las empresas musicales y también para los artistas, que han tenido que renovarse y adaptarse a los nuevos tiempos. El aprovechamiento de todas las posibilidades que los avances tecnológicos ponen a disposición de los usuarios y de los profesionales representan una renovación en el sector y un salto a una nueva forma de comprender el negocio musical.