Qué es el Marketing
El término Marketing proviene del idioma Inglés y fue en los Estados Unidos de Norteamérica donde se originó, además de ser el país donde se han hecho los mejores aportes sobre el particular. La palabra “Marketing” surgió en una institución académica y desde hace muchos años sólo comenzó a adaptarse al mundo de los negocios.
Dicha palabra quedó definitivamente aceptada en este idioma y su significado no ha sido problema alguno para especificar una determinada actividad. Sin embargo, para los países del habla hispana, no existe una traducción única en referencia al gerundio; dado que por ser esta actividad tan demasiado compleja, las diferentes traducciones han sido fruto de la inexperiencia, y es relativa y poca la compresión sobre todo el proceso que abarca. Es así como encontramos varias acepciones del vocablo, que tratan de dar un significado más o menos acorde con lo que realmente expresa el original, y que no han permitido que nuestro idioma exista una palabra que encierre el concepto de actividad constante y permanente
De acuerdo con ello, podríamos dar una traducción en sentido literal expresada como Mercadeando, pero, desafortunadamente esta expresión, fonéticamente hablando, no es agradable en nuestro idioma. Además, su connotación idiomática es totalmente diferente a lo que expresa el término original. Debido a esto, es muy corriente oír las expresiones como Comercialización, utilizada comúnmente en la Argentina, Mercadotecnia, en México, y en nuestro País, se han generalizado la palabra Mercadeo. Sin embargo, los españoles, padres de nuestro idioma, aceptan el término Marketing como palabra foránea.
En nuestro parecer el Marketing encierra una filosofía y una actitud dinámica.
Lo que tratamos de hacer notar no consisten en que las diferentes traducciones que las diferentes traducciones que los autores le den al término estén diferenciadas unas de las otras, porque de todas maneras, el Marketing, la Comercialización, el mercadeo y la Mercadotecnia, en la práctica, persiguen un mismo fin, aunque si es conveniente, tomar ciertas definiciones con tal de lograr al final, un concepto que pueda estar más acorde con la realidad y con el fin de unificar criterios.