La creación de empresas es la pieza clave para dar arranque al motor financiero. Pero, a pesar de que el número de personas que tienen intención de emprender ha crecido en los últimos años, todos ellos coinciden: el problema es la falta de financiación.
Dada la situación, cada vez hay un mayor número de inversores de diferentes perfiles, business angels, inversores privados, family office, venture capital… que apuestan por invertir en proyectos empresariales.
Según un estudio realizado por SociosInversores (plataforma de unión entre emprendedores e inversores) estos son los sectores más demandados por los inversores:
- El Primer puesto del ranking lo ocupan los proyectos tecnológicos e innovadores. Existe una alta demanda de proyectos con carácter innovador que introduzcan una solución tecnológica y adelantos en el modo de vida actual. En este ámbito, encontramos proyectos como Apps móviles y patentes.
- En segundo lugar se encuentra el sector de las energías renovables. La promoción y el desarrollo de proyectos renovables se encuentra desde hace unos años en pleno auge. En este campo, encontramos proyectos tan interesantes como avances de biomasa térmica, plantas industriales y ahorro de carburante.
- Los proyectos TIC ocupan un tercer puesto. La tecnología de la información y de la comunicación tiene una gran importancia en nuestros días, por ello es uno de los sectores más demandados del mercado por los inversores. Aquí puedes encontrar algunos ejemplos: Web de búsqueda de empleo, Plataforma musical.
- Según este estudio, el sector industrial sería el siguiente por número de demanda. Dentro de este sector, encontramos proyectos como sistemas de seguridad o transportes pesados.
El estudio también considera los aspectos que más atención presta un inversor:
- El plan de empresa. Un inversor valorará tanto el aspecto técnico como el visual.
- Profesionalidad del equipo promotor.
- El grado de equidad entre inversión y riesgo.
Muchos de los proyectos son desestimados por el inversor debido a la poca información del mismo que reciben por parte del emprendedor (¿cómo invertir en algo de lo que no tienes información?). Falta de garantías (un inversor sabe lo que es confiar su dinero en un proyecto que aún no está en marcha, pero necesita tener un mínimo de seguridad sobre el destino de su dinero). Los proyectos no cubren en muchas ocasiones las expectativas de los inversores: emprendedores e inversores no se terminan de poner de acuerdo; proyectos hay, inversores hay. Los intereses en muchos casos difieren.
Cuando un inversor no quiere invertir, no hay planes que valgan, lo pueden decir (o no) claramente u optar por ser políticamente correctos. Brian Witlin nos deja 25 maneras en las que un inversor puede denegar tu iniciativa:
Veamos las excusas más usadas para rechazar una propuesta…
Cuando existe una falta de interés o existe algún tipo de incertidumbre
- Sin respuesta.
- No encaja por el momento…
- Lo intenté, pero mis socios no lo han visto claro (muy típico cargar las culpas a terceros…)
- Somos reacios a invertir en tu iniciativa, pero manténme informado (no vaya a ser que funcione y esté a tiempo de subirme al carro).
- No estoy seguro, pero uno de mis socios que tiene más experiencia en esta área puede verlo.
Otro tipo de excusas usadas frecuentemente:
- No tenemos más espacio en el actual fondo para invertir.
- Es tarde para la inversión, debería de haber sido en una etapa anterior.
- Es aún temprano para la inversión, cuando esté más desarrollado podemos planteárnoslo. Cuando uno no quiere, no existe el don de la oportunidad.
Como hemos visto, puede resultar difícil enamorar a un inversor, pero cuando lo hace, lo hace de verdad.
Ana Barreda Carretero
SociosInversores.es