A la mayoría de las personas no les gusta sentirse bajo presión, porque se sabe que esto puede ocasionar estrés y afectaciones a la salud. Aunque existen estos riesgos, algunas transformaciones personales requieren de cierta dosis de presión, porque así se envía un mensaje contundente de las metas que se quieren alcanzar.
¿Por qué la presión conduce al éxito?
Aprender a enfrentar la presión es uno de los requisitos de los grandes éxitos.
Las personas que dirigen los proyectos y empresas más grandes, continuamente está sometidos a una gran presión, esto debido a tiempos ajustados, desafíos en el lugar de trabajo, imprevistos, cambios en la economía, nuevas políticas, la competencia, etc. Sería ilógico que estos gerentes se enfermaran con mucha frecuencia, de modo que tienen que aprender a enfrentar la presión y usarla en un sentido positivo.
A continuación, te presento las razones por las que la presión te ayuda a crecer a nivel personal y profesional:
1. Obliga el enfoque y la disciplina
Si una empresa está sometida a una gran presión por la ejecución de ciertas actividades, entonces no habrá tiempo para relajarse, se estará obligado a trabajar con una intensa disciplina y enfoque. Esto tiene un impacto positivo en el sistema de creencias, porque ayuda a generar la fe que produce estupendos resultados. Trabajar bajo presión te vuelve más eficiente en el uso de tus recursos y te ayuda a encontrar mejores formas de realizar procesos, permitiéndote así ser más productivo.
«La crisis te obliga a hacer más con menos. Algunos de los mejores proyectos surgen de las mayores dificultades.» -Norman Foster
2. Crea autoexigencia de resultados
Si estás trabajando bajo presión durante un buen tiempo, te sentirás con mayor convencimiento, derecho y merecimiento, entonces exigirás buenos resultados, los cuales tienen enormes probabilidades de presentarse.
«Si alguien te ofrece una increíble oportunidad y no estás seguro si lo puedes hacer, di que sí y entonces aprende cómo hacerlo después. Aprende sobre la marcha. Las oportunidades son pocas.» -Richard Branson
3. Estimula la creatividad
Si la presión está al límite, entonces las Ideas Creativas están mucho más dinámicas y en poco tiempo se pueden encontrar geniales soluciones a los desafíos.
«Allí donde la vida levanta muros, la inteligencia abre una salida.» -Marcel Proust
4. Se cierra la atención a las ideas negativas
Un cambio en el estado mental ocurre cuando se está expuesto a estímulos frecuentes. Si la presión te obliga a concentrarte en aspectos positivos, es seguro que podrás adquirir una mentalidad ganadora, la cual se mantendrá por el resto de la vida.
«Los obstáculos son esas cosas espantosas que ves cuando apartas los ojos de la meta.» -Henry Ford
5. Ayuda a adquirir nuevos conocimientos y desarrollar importantes habilidades
Cuando trabajamos dentro de nuestra zona de confort, donde todos nos es conocido y relativamente fácil, solemos sumergirnos en un estado de estancamiento profesional en el que todos los días se ven iguales, por tanto terminamos mecanizando los procesos que realizamos y no hay espacio para aprender cosas nuevas. En cambio, cuando tu mente se ve desafiada por entornos de incertidumbre y reto, te ves en la necesidad de adquirir nuevos conocimientos y desarrollar nuevas habilidades que te permitan afrontar los retos que se te presentan.
En lo desconocido está el conocimiento. Muchas de las habilidades que necesitas para lograr el éxito, solo las adquirirás a través de imponentes desafíos que pondrán a prueba tu capacidad.
«Quedarse en lo conocido por miedo a lo desconocido, equivale a mantenerse con vida, pero no vivir.»
Consejos para usar la presión a tu favor
- Busca constantemente nuevos desafíos. No permitas que la rutina limite tu crecimiento personal y profesional.
- Piensa en grande. La ambición ha sido el motor de los grandes logros de la humanidad.
- Establece metas concretas. Las metas guían tu visión. Define con claridad metas que te inspiren y te reten.
- Ponte limites creativos. Puedes jugar con elementos como el tiempo, cantidad o presupuesto de recursos para crear restricciones que te hagan sentir bajo presión y estimulen tu capacidad productiva.
- Nunca pares de aprender. La mejor forma de tener una mente activa y poderosa es siendo un voraz aprendiz.
- Rodéate de gente que te inspiren. Las personas que te rodean influyen poderosamente en tu mentalidad y en los resultados que obtienes, entonces procura compartir tu tiempo con personas que alimenten tu ambición, te desafíen y de las cuales puedas aprender valiosas lecciones de éxito.
- Afronta con creatividad los momentos de dificultad. Los momentos difíciles son una oportunidad para generar nuevas ideas.
- Descansa adecuadamente. Los grandes desafíos requieren de mucha energía, entonces asegúrate de cuidar tu salud, comer bien, hacer ejercicio y descansar adecuadamente, solo así tendrás la energía necesaria para lograr todas tus metas.
Conclusión
Trabajar bajo presión puede parecer en primer momento un mal consejo teniendo en cuenta los riesgos de salud asociados a ello; sin embargo, el ser humano necesita desafíos para crecer y desarrollar todo su potencial, pues es en los momentos que nos llevan a límite que finalmente nos damos cuenta de todo lo que somos capaces de hacer. En este contexto, debes procurar siempre estar en busca de esos desafíos que te ayuden a crecer, pero también estar al pendiente de tu salud para lograr una vida equilibrada y próspera. Da lo mejor de ti en cada desafío que te propongas, pero no te olvides de descansar adecuadamente para recuperar energía e ir tras objetivos mucho más grandes.
«Las uvas deben ser aplastadas para hacer vino. Las aceitunas se presionan para liberar aceite. Los diamantes se forman bajo presión. Las semillas crecen en la oscuridad… Cada vez que te sientas aplastado, bajo presión o en la oscuridad, estás en un lugar poderoso de transformación.»