Hoy en día es clave el tener una pagina web que represente una compañia o persona física y que dé una imagen de algo que queremos representar o que queremos compartir lo más clara y meridianamente posible. Es por esta razon por la que han proliferado compañías dedicadas a la creación de páginas web, en la que se cuidaban todos los aspectos y detalles de sus clientes y que trataban de trasladar a través de internet el fiel reflejo de las distintas empresas, en sus distintos sectores.
El problema surgió en que no todos tenían ese conocimiento para poder representar la imagen deseada, de ahí el «boom» de las plantillas prefabricadas. En un principio se crearon para ser utilizadas por usuarios que evidentemente no sabían programarlas, así tenían su página web sin necesidad de un coste que no estaban dispuestos a asumir. Con el tiempo, ciertas empresas del mundo del diseño web se dieron cuenta que era más facil modificar esas plantillas prefabricadas para sus clientes, con lo que los «diseñadores» reducían tiempo de diseño, sacrificando el ofrecer una pagina web de buena calidad para el usuario final y obligando al cliente a adaptarse a esa plantilla que ni concordaba con su enfoque de negocio ni se adaptaba a una serie de requisitos corporativos como puede ser el color, la adaptación al logo, etc.
Realmente algunas empresas de diseño web se adaptaron a ésta forma de trabajar ya que la tendencia era y es hacer paginas web simples y formales. Lo que no se ve, además de lo comentado anteriormente, es que la imagen no está optimizada y comprimida en el mejor formato, que no exista lo que se llama «código basura» dentro de la página y otra serie de circunstancias que hacen que la página pese menos y por tanto se cargue más rápidamente. Que importa eso si nunca la hemos visto cargarse más rápido.
Lo primero es entender que es el diseño gráfico realmente, de una forma simple sería la cubierta artística de una página web. Quitando la parte en que se debería hacer un análisis del negocio del cliente y un asesoramiento profesional para que continuamente se pueda innovar en cada creación, se podría decir que el trabajo que comprende la creación de una pagina web lo dividimos en tres partes: diseño, contenido y programación. En lo que al diseño se refiere entra en juego el trabajo creativo de un diseñador que tratará de compensar los espacios de textos con los de imagen, teniendo en cuenta distintas variantes en cuanto a tonalidades, tamaños y demás. En cuanto a lo que se refiere a contenido estaríamos en manos de profesionales del marketing online. En este apartado se tratará de resumir cuales son las distintas características del producto o servicio en cuestión y se tratará de reflejar en un contenido lo más sugerente posible. Por último, en cuanto al apartado de programación se refiere, lo pondremos en manos de los programadores que tratarán de plasmar técnicamente el diseño trazado y los contenidos acordados.