Uno de mis primeros clientes en la agencia fue un simpático y amable señor dueño de cadenas de hoteles. Este simpático señor acostumbraba bromear tanto conmigo por teléfono al llamarme que al inicio me pareció demasiado inocente pero, en una de esas sorpresas de la vida, resultó ser todo un experto en los negocios.
-Susana -me decía cuando se ponía serio-, recuerda que un negocio no es negocio si no es negocio.
Su frase puede resultar sinsentido pero él hacía una serie de ademanes para explicarse. Al primer negocio ponía su mano en su cabeza, al segundo en su pecho a la altura de su corazón y finalmente hacía con su mano el gesto de dinero.
Lo que quería decir era lo siguiente.
Un negocio no es un buen negocio ni un negocio inteligente si no es un negocio que sea tu vocación, un negocio que ames y que a la vez te sea redituable y te deje dinero.
Me tardé años en comprenderlo.
Pase por todas las etapas en contra de esa idea:
-Se me ocurrió que mi vocación no era redituable y me enfoque un rato a hacer algo que realmente no me gustaba.
-Se me ocurrió regalar mi trabajo porque me gustaba mucho hacerlo.
-Se me ocurrió enfocarme en hacer lo que quería y olvidarme de que necesitaba dinero para comer.
-Se me ocurrió volverme loca por conseguir todo el dinero que pudiera y olvidarme de lo mucho que me gustaba mi trabajo.
El asunto de emprender es que no se trata de dinero pero tampoco se trata de ser feliz haciendo lo que te gusta pero sin cobrar o cobrando mal y sin generar ganancias que te permitan pagar un lugar donde vivir y comida que llevar a tu boca. No sé tú pero yo necesito dormir cómoda y no puedo vivir de aire, necesito comida.
Es muy cierto que un negocio no genera de la noche a la mañana pero hay que ser objetivos e inteligentes:
-¿Cuál es tu producto / servicio estrella?
-¿Cuál es tu porcentaje de ganancia?
-¿Cómo puedes generar más ventas?
-¿Cómo puedes lograr un equilibrio entre lo que TÚ quieres hacer u ofrecer y lo que EL CLIENTE quiere, necesita y está dispuesto a comprar?
Lo que aprendí de mi simpático cliente, al igual que de muchos otros empresarios y emprendedores con los que he tenido la oportunidad de colaborar es que si ofreces VALOR, recibirás VALOR. ¿Qué quiere decir esto? Que si realmente ofreces un producto / servicio encaminado a APORTAR es natural que te APORTE ganancias. Créeme.
En mi propia experiencia, fue cuando decidí dejar de lado todo eso que creía que “era más redituable” y empecé a dedicarme a lo que realmente QUIERO hacer que todo empezó a fluir más naturalmente. Esto, sin embargo, no quiere decir que me he olvidado de la parte objetiva del asunto; cada uno de los servicios que ofrezco tiene bien delimitado su margen de ganancia, para la empresa, para cada uno de los involucrados y, naturalmente, para mí.
Porque sí, querido empresario y emprendedor. Uno de los apartados de la planeación de ganancias es que tomes en cuenta tus propios gastos ¡No te olvides de ti mismo!
Después de un par de años de experiencia, por ende, acostumbró señalar 3 puntos principales como INICIO para delimitar si una idea de negocio es realmente una buena idea:
1. ¿Es un negocio inteligente?
Algo que realmente tiene sentido en tu vida. Por ejemplo digamos has decidido que vender café ¿tienes la facilidad de conseguir proveedores de café? ¿sabes de café? ¿te gusta el café? De pura casualidad ¿no eres alérgico al café?
2. ¿Es algo que te apasiona hacer?
Algo que te gusta tanto que lo harías incluso gratis. Si yo pudiera diseñar gratis lo haría, por ejemplo. Y me encanta también el desarrollo de negocios por Internet, mi socio y yo damos conferencias gratis al respecto. ¡Y me encanta!
3. ¿Es algo que te deje una ganancia y sea redituable?
Lo que no se vende no se vende y a veces incluso lo que se vende, mal calculado, da problemas. Pregúntale a mi cliente que vendía una taza de café en 2 dólares cuando tan solo su costo de producción era de $2.5 dólares. Vendía un montón… y perdía bastante en cada venta.
Mi cliente dueño de la cadena de hoteles sigue siendo mi cliente en cuestiones de diseño hasta hoy en día. Tiene un montón de otros negocios. Todos le gustan, todos tienen mercado y todos, absolutamente todos, le reditúan unas bien planeadas y merecidas ganancias.
¿Y tú cómo vas? ¿Te sientes list@ para trabajar en desarrollar un buen negocio que cumpla esos tres puntos?
Twitter: @susabaiza.