Una de las grandes ventajas de Internet es la posibilidad de expandir una tienda online a nivel internacional. Y ya nadie duda que una de las mejores maneras de crear confianza en el usuario es ofrecer contenidos en su propio idioma, un criterio que además es indispensable para el posicionamiento orgánico en un país extranjero. Y muchos pequeños e-commerce lo ven claro: recurrir a la traducción automática.
Este recurso fácil es el responsable de que el 80% de los clientes encuentren errores de traducción en tiendas online y abandonen el proceso de compra porque no sienten confianza o porque no son capaces de encontrar el producto que están buscando, lo que se traduce en pérdidas económicas millonarias.
El problema de la traducción automática
Por más potentes que puedan parecer las herramientas de traducción simultánea como Google Translate, siempre es necesario la revisión humana que entienda los matices y múltiples acepciones que pueda tener un término.
Una tienda online optimizada en diferentes idiomas debe entender que tal vez hay términos del inglés que no tiene sentido traducir (como “brackets”, “fitness”, “software” o “resolución HD” ) o que presenten varios significados. También podemos encontrarnos con traducciones automáticas que no entiendan refranes, juegos de palabras o formas de cortesía y cambios de género.
En este sentido, todo proyecto online debe poner especial esfuerzo en ofrecer descripciones de productos y copys publicitarios traducidas con calidad. En el caso de descripciones de producto con errores de traducción aumentan la tasa de abandono un 20%.
La correcta traducción de los contenidos, además de ser crucial para la venta de productos online, también lo es para crear imagen de marca y afianzar relaciones en el sector B2B, donde la reputación y la confianza juegan un papel fundamental. Y es que presentar la información corporativa con una mala traducción también puede salir muy caro.
Para lograr una traducción de calidad que respete el espíritu de la redacción original, la traducción humana ebe estar siempre presente en todo proyecto multilingüe. Y Para evitar este problema y en un entorno completamente digital, surgen proyectos como Parlam, un market place de traductores que pone en contacto a profesionales de traducción de textos y documentos con empresas en pleno proyecto de expansión internacional.
No olvidemos que una traducción correcta juega un papel crucial en toda estrategia internacional y que es indispensable para asegurar el posicionamiento SEO en otro país y poder realizar el seguimiento de los diferentes mercados, así como nos permite ofrecer contenidos de calidad, tanto en las descripciones de productos, como en el blog, en las redes sociales o en la presentación de la empresa.