¿Alguna vez has sentido que la rutina es la misma todos los días?
Bueno, seguramente se debe a que a veces no vivimos en un modo presente ni consciente de lo que está pasando a nuestro alrededor, solamente nos dejamos llevar por un piloto automático que nos guía por la sociedad y sus problemas.
Lo que yo propongo es que despiertes y te des cuenta que ningún día es igual, los días no se repiten, lo que se puede repetir es tu actitud frente a cada día, pero si no cambias de actitud los problemas y las cosas que vives a diario no van a cambiar, para cambiar debes cambiar primero tu y luego todo lo demás va a cambiar.
Comprende que el pasado ya pasó y el futuro aún no llega, todo lo que tienes es el hoy, qué más pruebas necesitas para darte cuenta que si no valoras y amas tu presente vas a pasar gran parte del tiempo lamentándote por tus errores y pensando sino en todo lo que puedes hacer en el futuro.
Desde el día que me di cuenta que ningún día es igual, comencé a vivir a mi manera, a mi modo sin prisa y con estrategia, confiando en el proceso, siguiendo un plan, pero tranquilo y confiado porque mi mente y mi cuerpo viven en un presente donde todo existe y es real, no me preocupo por el mañana porque aún no ha llegado ni me angustia el pasado porque ya lo viví, y si hubo errores, ya sé que habrán consecuencias.
No es tan difícil entender la teoría, la aplicación de la misma es lo que nos toma tiempo entender. Hoy y todos los días tienes la oportunidad de cambiar y elegir la actitud que te pondrás encima. Cada día tienes la oportunidad de empezar de nuevo y ver a los demás con ojos de verdad y mentalidad de crecimiento. Espero haber aportado algo en ti. Cuenta conmigo.
Arnold Cabrera