Parece evidente que la formación formal sigue conservando su hegemonía y su papel central en el entorno laboral. De todos modos, el aprendizaje informal, menos conocido y también menos valorado, aparece como una nueva forma de formación participativa. Algunos países han empezado a valorar y evaluar el aprendizaje informal en el desarrollo de las competencias del itinerario profesional individual a través, por ejemplo, de los certificados de profesionalidad. ¿Qué rol juega el social learning en la optimización de la formación? Y sobre todo, ¿qué papel tiene en la formación online a través de una plataforma e-learning?
El aprendizaje informal en la formación online
El social learning tiende a perfeccionar la formación online gracias a los medios sociales, con el objetivo de una mejor comunicación entre los alumnos así como entre los alumnos y los responsables pedagógicos. Al mismo tiempo se busca conseguir la optimización de los objetivos de la formación.
El social learning desarrolla la formación informal (aprendizaje que va más allá del marco estructurado de un sistema de aprendizaje, basado sobre todo en las interacciones y el intercambio de experiencias) dando a los alumnos la posibilidad de completar los conocimientos que han adquirido formalmente. Efectivamente, en el momento en que estamos compartiendo, preguntando, comunicando, o en otras palabras, evolucionando hacia un entorno más social y eminentemente práctico, somos capaces de adquirir e interiorizar aún más conocimientos.
Debemos recordar que cerca del 90% de los conocimientos que adquiere una persona proviene del aprendizaje informal, omnipresente en nuestra vida cotidiana a través de los intercambios, consejos entre compañeros o responsables pedagógicos y de la experiencia que nos forma profundamente. En este contexto, es natural que se plantee qué presencia debe tener esta formación informal o social learning en la formación online.
Las funcionalidades sociales en una plataforma e-learning
Más allá de los intercambios a través de correo electrónico o de las clases virtuales que ya están presentes en las formaciones online desde hace varios años, en este momento el social learning debe ir más lejos. La plataforma e-learning debe aportar funcionalidades de gestión y dinamización de la comunidad de social networking. La presencia de estas funcionalidades en la plataforma e-learning favorecer las comunidades de aprendizaje a través de varios medios y herramientas sociales como wikis, blogs, foros, mensajería e integración de redes sociales. Así mismo podemos encontrar también funcionalidades que permiten que los usuarios compartan información como el microblogging. Un refuerzo de eficacia para la formación online que permite dar en el ámbito de la formación, como ya ocurre en otros campos, un mayor protagonismo de la colaboración y una comunicación integral.