La ciberseguridad en la era digital es mucho más importante ahora de lo que era hace unos años. Se estima que los empleados en una compañía tienen acceso a más de 10 millones de archivos, de los cuales solo el 5% está protegido, según estadísticas compartidas por la firma Retarus.
Del mismo modo, cerca del 70% de ataques cibernéticos en el mundo tiene un móvil económico, y cada minuto se pierden casi 3 millones de dólares a causa de estos ataques. Por tal motivo, hemos decidido compartir algunas herramientas de seguridad informática básica para cualquier empresa emergente.
VPN para cifrar el tráfico en internet
La red privada virtual (VPN, en inglés) es una herramienta que cifra y oculta el tráfico en línea, tanto a terceros como al mismísimo proveedor de servicios de internet.
La VPN es infalible para empresas que utilizan y comparten todo tipo de información relativa a su compañía: desde imágenes con derechos de autor y reportes de ventas, hasta nómina e inventario. Toda esta información, en forma de mensajes, archivos y movimientos bancarios se encuentra cifrada y protegida de cualquier interceptación.
Para el cifrado del tráfico en línea, basta instalar la VPN como software en el computador. Una vez instalada, esta puede activarse o desactivarse en cualquier momento (aunque lo ideal es mantenerla activada). Algunos proveedores como Surfshark ofrecen software VPN con prueba gratis.
Antivirus premium como medida de protección anti-malware
No se recomienda un antivirus gratuito para pequeñas o medianas empresas, al tratarse de las entidades más apetecidas para enviar ataques de phishing o ransomware. Para reflexionar: la negligencia en la activación de un antivirus de calidad es justamente el punto débil que suelen aprovechar los atacantes.
Por otro lado, algunos proveedores de VPN (herramienta #1) ofrecen funcionalidades extendidas que incluyen antivirus y alertas de phishing. El uso de estas funcionalidades extra puede ahorrar gastos y, más importante aún, evitar cualquier incompatibilidad entre el software antivirus y el software VPN.
Viceversa, la mayoría de los antivirus ofrecen soluciones VPN. Pero, en este caso, suelen venir con costo adicional (a veces excesivo), y la calidad de la VPN no es tan óptima como la que ofrece un proveedor VPN dedicado.
Certificado SSL para ofrecer seguridad a los visitantes
El certificado SSL es un estándar de protección de datos al interior de una página web. Con el SSL, la información que el usuario envía al sitio web (como el número de tarjeta de crédito al realizar una compra, o el correo electrónico al iniciar sesión) está seguro.
Cualquier visitante puede consultar este certificado. Basta hacer clic en el ícono de candado que suele ir al lado de la barra de dirección del navegador. Al hacerlo, se puede ver el mensaje «Su conexión es segura», entre otros detalles.
Las páginas web que no tienen certificado SSL muestran un ícono de candado tachado. Además, los navegadores web como Chrome o Firefox disparan una notificación sobre la falta de seguridad del sitio web, y advierten al usuario de visitarlo bajo su propio riesgo. De allí la importancia de obtenerlo para no perder visitas ni ventas.
Este certificado puede adquirirse a través del proveedor de hosting. También es posible obtenerlo gratis.
Apenas estoy empezando mi negocio, ¿Necesito estas herramientas?
Los expertos recomiendan que toda empresa, por pequeña que sea, anteponga su seguridad informática desde el inicio de su fundación.
Hay que tener en cuenta que, actualmente, las empresas se apoyan en la tecnología desde el inicio de sus actividades comerciales, ya sea que cuenten con estrategias de crecimiento digital (como página web o aplicación móvil), o que solo utilicen herramientas colaborativas como correo electrónico o Slack para la administración del trabajo remoto.
Adicionalmente, la protección y privacidad de datos es un tema que ha adquirido gran relevancia en los últimos tiempos. Los usuarios son cada vez más conscientes de la información que comparten en línea, por lo que desconfían de empresas que 1. Piden almacenar demasiados datos, 2. No parecen tener una política de privacidad clara, 3. No cuentan con herramientas de seguridad mínimas.
Por fortuna, las herramientas que acabamos de mostrar son relativamente económicas para pequeñas empresas y, en algunos casos, gratuitas.