Todos los hogares, no importa cuán grande o pequeña sean, son su propio negocio. Al igual que una empresa, un hogar tiene activos, pasivos, ingresos y gastos. Y como un negocio, cada hogar dispone de varios estados financieros que explican la relación entre ellos.
Los activos y pasivos, ingresos y gastos; puedes ser que no estés conscientes de ellos, pero realmente existen. Los etalles de tu situación financiera se expresan en números concretos, tales como la cantidad de dinero que le debes a la compañía de tarjetas de crédito o la cantidad que tienes en una cuenta de ahorros. Los números son como palabras; aprende a leerlos y podrás entender la historia. Aprende a leerlos y analizarlos, y serás capaz de cambiar la historia a tu gusto.
Hoja de Balance y Declaración de ingresos
Hay muchos tipos de declaraciones que reflejan el estado de sus finanzas. Los dos más importantes son la hoja de balance y la declaración de ingresos. La comprensión de estos dos documentos y su relación entre si son la llave maestra para alcanzar la libertad financiera.
La Hoja de Balance
La hoja de balance se explica por sí mismo: Equilibra el valor de sus activos frente al valor de sus pasivos. Una mitad de la hoja de balance enlista los activos, la otra mitad los pasivos:
El balance indica cuánto dinero tienes, cuánto dinero debes y la diferencia entre los dos en un momento determinado.
Del balance se puede determinar tu patrimonio personal o el patrimonio neto, que es la diferencia entre el valor de tus activos y de tus pasivos:
Patrimonio neto = activo – pasivo.
En otras palabras, tu patrimonio neto es cuanto te queda luego de pagar todas las deudas de tus pasivos (cuentas y préstamos), o el déficit de la misma. Es cuanto vales en el día que el balance es hecho
Declaración de ingresos
La declaración de ingresos, también llamado estado de ganancias y pérdidas, mide los ingresos y los gastos. Una sección de la declaración lista todos los ingresos (ya sea ganado, pasivo o de cartera) mientras que la otra sección lista todos los gastos.
A diferencia del balance, el cual es una fotografía del patrimonio neto en un punto determinado en el tiempo, la declaración de ingresos cataloga los ingresos y los gastos durante un período de tiempo. Preparar una declaración de ingresos regularmente, como cada mes, es una buena manera de medir tu progreso financiero.
La declaración de ingresos y la hoja de balances tienen una relación simbiótica. Por ejemplo, la declaración de ingresos ayuda a determinar si una entrada de la hoja de balance debe aparecer como un activo o un “doodad”.
La declaración de ingresos empieza con el ingreso bruto y termina con el ingreso neto (CASHFLOW). El ingreso bruto es el dinero ganado a través de un trabajo o de un negocio o inversión. Los ingresos netos, para nuestro propósito, es la porción del ingreso bruto con el que te quedas luego de descontar todos los gastos de él:
Ingresos netos = ingresos brutos – gastos
Una forma práctica de visualizar el flujo de efectivo es combinando la declaración de ingresos y la hoja de balance en un único estado financiero.
Los estados financieros son un elemento crítico para la generación de riqueza, porque te muestra cómo el dinero está fluyendo y además determina tu grado de libertad financiera. En tu juventud tienes una libreta de calificaciones para la escuela. Tus estados financieros son tu libreta de calificaciones para la vida.
Fuente: http://EscuelaParaRicos.net