La persona exitosa está regida por una serie de hábitos productivos, los cuales se van adquiriendo poco a poco, hasta que llegan a formar parte de la personalidad y luego se actúa con principios muy sólidos y de manera natural.
Los hábitos productos hacen una gran diferencia.
La gente que adquiere hábitos productivos marca una notable diferencia en cada una de las tareas que ejecuta, algunos beneficios se reflejan en lo siguiente:
- Eficiencia para hacer diferentes trabajos.
- Menores niveles de estrés.
- Una vida más saludable y equilibrada.
- Logro de objetivos.
- Vida satisfactoria en diferentes áreas del desarrollo personal.
- Mayor autoconfianza.
- Etcétera.
¿Cómo consolidar los hábitos productivos?
- Identificar los malos hábitos:
Primero identifica tus malos hábitos que están afectando tu crecimiento personal, por ejemplo: la tendencia a la irresponsabilidad, actitud conformista, dormir demasiado, ver mucha televisión.
- Eliminar los malos hábitos y convertirlos en productivos:
Se puede pasar de la irresponsabilidad y conformismo a la alta responsabilidad y un gran deseo de éxito. Estos cambios requieren de mucha perseverancia, es necesario cambiar la manera de pensar, tomar la decisión de avanzar por el sendero de las metas y vencer la resistencia de la mente que buscará llevar a los mismos escenarios.
- Adquirir hábitos productivos por etapas:
Efectuar demasiados cambios es muy complicado, porque no hay tanta energía para hacerlo. Por esa razón se aconseja ir por etapas. Identifica cuáles son los hábitos productivos que más te urge adoptar, quizás sea la disciplina, concentración, el orden, etcétera. Una vez que ya hayas programado en tu mente una nueva forma de ser, entonces podrás pasar a otra etapa.
- Sostener el hábito productivo al interior de tu mente:
Si cambias radicalmente tu manera de pensar, entonces todo tu mundo se transformará, experimentarás el verdadero poder personal.
- Emplea toda tu voluntad para detener la inercia mental tradicional:
En este momento puedes tomar la decisión de dejar de fumar, hacer ejercicio con regularidad, de no perder tanto tiempo en la televisión, etcétera. Pero a los pocos días, estará una gran presión mental de retornar a los viejos patrones, es ahí donde se necesita usar toda la voluntad para mantenerse en la idea de cambio y aferrarse a los hábitos productivos, al inicio será difícil, pero después de pasar muchas pruebas, se observarán los buenos resultados.