Hace poco leí un libro con un nombre bastante particular: Funky Bussiness y aunque está catalogado como un libro de negocios, lo cierto es que da elementos para ser tenidos en cuenta a nivel personal; algunas de sus manifestaciones indican que el libro esta hecho para personas que buscan mas que trabajar para vivir.
Que bueno a partir de esta idea, reflexionar por un momento acerca de nuestro modo de vida actual.
Un modo de vida impuesto, rodeado de ambiciones efímeras que nos llevan a escalar puestos de poder con la única pretensión de ir tras los propios intereses, mucha veces pasando por encima de los intereses comunes de quienes nos rodean, estamos atrapados en medio de excesos de información que no somos capaces de digerir y que hace que perdamos la perspectiva de lo importante y lo que es peor, un inmenso temor por dejar lo conocido y arriesgarnos a buscar algo mas.
Aunque desde hace algunos años hay una fuerte tendencia hacia la espiritualidad, tal vez buscando aliviar en parte el estrés y la frustración producto de un modo de vida condicionado, aun no hemos logrado trascender mas allá y cambiar la actitud ligada a la posibilidad de vivir para trabajar y dejar un legado, mas que un legado económico es ir mas allá y dar un paso hacia la construcción de sueños e ideas.
El verdadero desafío está en cambiar la actitud, destruir para construir, como decía Mao Tse Tung. Destruir todo aquello que limita la inspiración y donde las ideas pierden valor, para construir a partir de ideas de libertad y diversión, entendidas no desde su sentido literal, sino como una posibilidad de pensar y actuar desde ideas claras, creativas e innovadoras, con tal fuerza que podamos transmitir pasión a todos los que nos rodean.
Es el momento de abrir la puerta hacia la oportunidad de crear espacios creativos para contar historias exitosas en donde predomine la intuición, la fantasía y la imaginación, espacios en los que puede participar toda persona que este buscando conectarse con otras personas pero sin perder su esencia como ser único.
El camino que hay que seguir es aquel en el que la imaginación, la inspiración y la iniciativa permitan encontrar una perfecta armonía entre trabajo, aprendizaje y vida, para construir auténticos sueños de libertad y de amor.