Esa era la voz que se repetía dentro de la cabeza del granjero en la película “El campo de los sueños”.
¿Pero qué quiere decir esto ya aplicado en los negocios?
Si me lo preguntas a mí, te diré que mucho.
Quizás te estés preguntando… ¿Qué caramba tiene que ver una película de los 80’s con esa frase un tanto confusa con los negocios?
Al comienzo yo tampoco lo entendía, pero ahora tiene mucho sentido. Y se relaciona sobre todo con la ya famosa frase (y además aplicada por millones de personas) “Hasta no ver no creer”.
A diario veo publicaciones donde muchas personas comentan cosas como:
- Sí, claro, ese negocio no funciona
- Primero ten éxito tú y ya luego me invitas
- Otro más que quiere engañarnos
- Si, ajá, cómo no…
- Etc…
Estos son solo unos cuantos ejemplos de las variaciones de la frase que te mencioné anteriormente “hasta no ver no creer”.
Por otro lado lo que nos sugiere “El campo de los sueños” es que escuches a tu voz interior y a ninguna otra; sigue tu instinto.
Es mucho el ruido externo, pero solamente tú sabes lo que tienes que hacer… escúchate, obedécete, síguete a ti mismo/a.
Cuando comienzas a hacer esto muchos se pondrán en contra tuya. Al granjero de la película, su misma esposa le pidió que de favor dejara de lado sus locuras, que solo perdía su tiempo y dinero.
La voz le pidió que construyera un estadio de béisbol y así lo hizo, asistían jugadores que solamente el granjero y su hija podían ver en un comienzo. Pero conforme continuó siguiéndose a sí mismo, fue ganando confianza y fe.
Tales fueron los incrementos de confianza y fe en lo que hacía que luego hubo otra persona que pudo ver lo que el granjero veía y luego otro y luego otro, y luego pudo llenar su estadio y solucionó sus problemas de deudas entre otras cosas.
Muchos pueden decir… ¡Bah, es solo una película de fantasía!
Pero si me lo permites, yo puedo agregar… ¿Entonces por qué ha resultado del gusto de tantas personas? ¿A caso para quienes trabajaron como actores en esta película no fue algo serio que les resultó en un gran ingreso económico?
Si tú mismo no confías en tu trabajo, en lo que ofreces; en tu negocio y solo haces caso de lo que los demás dicen. Entonces no esperes llenar de clientes tu establecimiento o propuesta de negocios.
Construye tu confianza, tu proyecto, tus presentaciones, tu material de ventas o lo que sea que tengas que preparar… y entonces la gente, tus clientes vendrán.
Si ya te has decidido a construir tu propio “campo de béisbol” entonces permíteme apoyarte… suscríbete para recibir más material como este que te mantendrán enfocado/a.