El sector de las operadoras de telefonía móvil mueve miles de millones de euros cada año. Sin embargo, esto no se traduce en una buena imagen pública. Las compañías de teléfono a menudo son denunciadas por no dar el trato al público que éste merece o tener demasiada letra pequeña que luego provoca sorpresas. Según un estudio de la OCU del pasado año, son las grandes operadoras con red propia las que provocan mayor insatisfacción y las medianas de carácter regional las que consiguen tener a sus clientes más satisfechos. Por ello, a la hora de buscar cuál es el mejor operador para contratar una tarifa, es mejor echar un vistazo a un comparador móvil que nos cuente cuáles son las ventajas e inconvenientes de cada opción.
Por ejemplo, en la sección de ADSL y móvil de Comparaiso podemos encontrar todas las tarifas móviles, únicas o combinadas con ADSL, fijo y/o fibra óptica que es posible contratar en nuestro país. De esta forma, teniendo en cuenta la totalidad de la oferta y ventajas e inconvenientes, podemos encontrar el operador que mejor servicio nos va a ofrecer o, al menos, el que mejor se corresponda con lo que estamos demandando. A la hora de ahorrar en la tarifa de nuestro móvil debemos ser conscientes que no se trata simplemente de contratar el que ofrezca mayor velocidad a mejor precio sino el que mejor nos venga para el uso que le vayamos a dar. Si nuestro uso es limitado o estamos la mayor parte del tiempo en casa o en el trabajo, dónde disponemos de WiFi, quizá no necesitamos una tarifa de datos muy elevada y podamos contratar una más pequeña a menos precio.
También hay que tener en cuenta todas las disposiciones adicionales que suelen ser aquellas por las que terminamos pagando de más. Los comparadores nos ayudarán a saber cuáles tienen permanencia y por cuánto tiempo así como el precio final de aquellas tarifas que ofrecen un año o determinados meses a un precio inferior. Una vez visto hecha la cuenta podemos comprobar si esa oferta nos va a ayudar a ahorrar de verdad o si la subida de precio posterior no compensa. Por norma general, si lo que queremos es ahorrar, lo mejor es contratar una tarifa sin permanencia y estar pendiente a los cambios del mercado ya que continuamente están saliendo nuevas ofertas que nos permiten ahorrar. Cambiarnos de oferta incumpliendo una permanencia nos puede suponer el pago de una penalización en la mayor parte de los casos –hay otros en los que la nueva compañía se hace cargo del pago- y dejar de resultarnos rentable.
Igualmente, podemos aprovechar los distintos estudios que aparecen en los comparadores sobre cobertura ya que de nada nos servirá tener una tarifa muy económica si luego no podemos llamar o no hay cobertura suficiente en nuestra casa. En los últimos años están saliendo algunos mapas de cobertura mediante los cuales podemos saber que operadoras nos ofrecen la mejor y así tener otro dato en cuenta a la hora de buscar que tarifa móvil nos sale más rentable.