Una de las preocupaciones más comunes de mis lectoras es cómo saber si van bien o mal en lo que hacen. Ya sea respecto a una decisión, un cambio profesional o un negocio recién lanzado.
A veces te preocupas por eso antes incluso de hacer algún cambio, “¿Y cómo voy a saber si voy bien o no?”. En mi opinión, esta pregunta no es más que una exteriorización del miedo a fracasar, como si el hecho de poder ir mal significara que vas a acabar perdiéndolo todo y viviendo debajo de un puente o algo así.
Ya he hablado de eso en otros artículos, pero, para ser breve, la probabilidad de que eso suceda, en la gran mayoría de los casos es muy baja (y digo la gran mayoría de los casos porque nada es imposible, no para que pienses que entonces tu eres ese pequeño porcentaje).
La cuestión es que, cuando uno tiene miedo, se aferra a cualquier excusa para no dar el paso, así que vamos a intentar eliminar esta para que te animes a dar ese primer paso o a seguir adelante si ya estás en marcha. ¿Qué signos te dicen si vas bien o mal? En mi opinión y según mi propia experiencia:
1. Cuando tu vocecita interior te dice que en realidad no es eso lo que quieres.
Y sí, esto pasa, que te animas a hacer algo y por dentro piensas: “pero si es que no quiero hacer esto”, y luego surgen las justificaciones que hacen que, aún así, sigas adelante: “pero es que tengo que hacerlo/es lo que se espera que haga/qué van a decir si lo dejo/voy a parecer una fracasada”, etc. Y acabas haciendo algo que no quieres hacer y, además, lo sabes.
2. Cuando no ves progreso de ningún tipo.
Yo siempre les digo a mis clientas, especialmente cuando empiezas tu negocio, que hay un período de siembra en el que haces mucho y ves poco, hasta que llega la hora de la cosecha y las cosas cambian. Pero que veas poco no quiere decir que no veas nada. Así que primero determina que resultado quieres lograr y qué consideras progreso, y luego ve analizando cada cierto tiempo si hay avances. Si no los hay, es hora de plantearse qué pasa.
3. Cuando no tienes vida.
Varias veces me han comentado personas que tienen tanto trabajo o que están tan poco organizadas que no tienen vida. Si no tienes tiempo para ti o para tu familia, si estás estresada, si levantarte supone casi un suplicio porque sabes que te espera otro día matador, algo no va bien.
Hay que entender que puede haber épocas más intensas que otras, pero que seas tu la que tiene el control. Por ejemplo, cuando yo estoy en medio de un lanzamiento de un nuevo programa, es una época de mucho trabajo y algo de estrés. Pero lo sé y sé cuánto va a durar y qué tengo que hacer, por lo tanto no es un problema. El problema sería si estuviera siempre así.
Sin dudarlo la mejor forma de determinar si vas bien o mal es que, antes de empezar (o, si ya estás en marcha, antes de seguir), determines qué consideras tu “ir bien”. Así podrás tomar decisiones con claridad en lugar de intentar dilucidar las cosas cuando estás en pleno caos. Por eso es importante que cada cierto tiempo repases tu trayectoria y decidas por dónde quieres ir y qué quieres conseguir, para poder seguir adelante sabiendo que sí, que vas por buen camino y que si te tuerces, sabrás cómo corregirlo.
¿Qué me dices? ¿Cómo sabes tu si vas bien o mal?