Según Emilio Botín, Ramón Areces, e Isidoro Álvarez, arquitectos del Banco Santander y El Corte Inglés, supieron traspasar las fronteras innovando en gestión y transformando pequeñas entidades en referentes mundiales de la gestión bancaria y la distribución comercial, a continuación desde su experiencia comparten claves que cualquier emprendedor quisiera saber del mundo empresarial.
Emilio Botín destaca el liderazgo, carisma personal y el espíritu emprendedor que al frente del grupo Banco Santander, enuncia claves para el crecimiento del gigante económico han sido:
- Modelo de negocio basado fundamentalmente en la banca comercial relegando la banca de inversión
- Explotación de capacidades centrales y conocimiento adquirido
- Orientación al cliente e innovación comercial. Fue la primera entidad bancaria en eliminar las comisiones por servicios.
- Estrategia de crecimiento basada en la internacionalización
- Diversificación geográfica apostando por el mercado de América Latina y Europa
Ramón Areces fue el artífice de la transformación del Corte Inglés de pequeño comercio a unos de los más importantes grupos de empresas españoles. Areces e Isidoro Álvarez, gestionaron la entidad con un profundo conocimiento del negocio y un avanzado modelo de distribución comercial.
La clave de su éxito radicó en la integración del equipo humano y la implicación de la dirección en el mismo. El Corte Inglés supo conservar el carácter familiar de su empresa a haciendo de prácticamente, todos sus empleados accionistas de la compañía.
- Reinversión de los beneficios en el negocio
- La autofinanciación y evitar el endeudamiento
- Calidad total y máximo compromiso con el cliente “Si no queda satisfecho, le devolvemos su dinero”
- Fuerte inversión publicitaria y promocional, es emblemático su conocido “Ya es primavera en El Corte Inglés”
Tras Ramón Areces, Isidoro Álvarez fue quien dirigió la expansión de El Corte Inglés al emprender la diversificación de otras líneas de negocio como hipermercados, agencias de viaje, compañías de seguros, servicios tecnológicos y financieros.
Siendo un claro ejemplo que una generación empresarial se puede sostener y evolucionar con ideas frescas sin perder sus arraigos, conquistando no sólo nuevos clientes sino desarrollando estrategias efectivas para estar un paso más cerca del éxito.