Una de las puertas de acceso al mundo emprendedor es el comercio, que se ha visto facilitado y potenciado por numerosas herramientas web dando origen al comercio electrónico, de características muy diferentes al tradicional.
Internet imprime su lógica en todas las actividades, y ésta no ha sido la excepción. Tal es así que se podría decir que el comercio electrónico es 1% comercio y 99% electrónico. ¿Qué significa esto? Que el comercio electrónico le debe más a las nuevas tecnologías de la información y la comunicación que al comercio tradicional, en lo que respecta a formas de promoción, métodos de pago, atención al cliente y, en suma, a todas las áreas que integran la actividad.
En esta oportunidad realizaremos un recorrido por las dos formas más comunes del comercio electrónico: el recurso a los sitios de subastas (a la manera de las internacionalmente conocidas Ebay.com y Amazon.com), y la posibilidad de tener una tienda online propia, analizando ventajas y desventajas.
Sitios de subastas
Los sitios de subastas online (que no son otra cosa que grandes y masivas tiendas online, en las que coexisten tanto subastas como ventas a precio fijo) son frecuentemente la primera toma de contacto del emprendedor con el comercio electrónico, debido a la facilidad de acceso que suponen. Basta con crear una cuenta para poder empezar a vender. Esta facilidad, por supuesto, tiene como contracara algunas desventajas a tener en cuenta: es muy probable que nuestra competencia esté también ofreciendo sus productos o servicios en el mismo sitio, el hecho de que nuestra venta siempre dependerá y estará condicionada por las políticas del sitio web del que nos servimos (un súbito aumento de la comisión por venta incidirá en nuestro precio final), y la dificultad que supone hacer conocer nuestra marca (será siempre más recordada la marca del sitio web que nos sirve de plataforma).
La razón por la que los sitios de subastas adquirieron masividad en poco tiempo es el hecho de que le permiten a cualquier individuo tener acceso a consultar u ofrecer productos de forma rápida y sencilla. Para el comerciante o el emprendedor resultan una herramienta inigualable, ya que no es necesario contar con una tienda comercial real, y puede realizarse la venta desde el propio hogar, difundiendo productos no sólo a nivel nacional, sino también internacional. Actualmente, también se ofrece la posibilidad de promocionar no sólo productos sino también servicios.
La propia tienda online
La otra posibilidad, mucho más recomendable pero que requiere un grado de involucramiento mayor, es crear una tienda online propia. Afortundamente esto puede lograrse sin necesidad de altos costos de programación y diseño, debido a que existen herramientas gratuitas y de uso libre como la tienda online OsCommerce. A la vez, las tiendas online pueden ser complementadas con servicios de pago electrónico como Paypal y Xoom, que les permitirán a nuestros clientes abonar desde cualquier parte del mundo, con tarjetas de crédito, depósitos y transferencias bancarias, así como muchas otras opciones.
La experiencia es el mejor ejemplo, y para ello comento mi caso particular: mi tienda online dedicada a los juguetes retro fue desarrollada íntegramente con la plataforma OsCommerce, a la que personalicé a la medida de mis necesidades. Luego le adicioné un blog basado en WordPress, vinculado a través de una fuente RSS a la fan page de Facebook, que actualmente cuenta con más de diez mil fans. Como se puede ver, todas son herramientas gratuitas. Además, la tienda online incorpora como sistema de pago Dineromail.
Si bien una tienda online propia requiere un nivel de compromiso y dedicación mucho mayor, es el camino más recomendable para el emprendedor, ya que le permite contar continuamente con un canal de ventas propio y auto administrable. Aún así, la presencia en sitios de subastas puede seguir siendo un método de promoción paralelo, y una excelente forma de atraer nuevos clientes.
El comercio electrónico sin duda ha renovado la forma de comprar y vender. Teniendo una tarjeta de crédito internacional, es posible comprar un producto a China y tenerlo en la puerta de nuestro hogar a los quince días de efectuada la compra, algo completamente inimaginable un tiempo atrás. Muchas tiendas virtualizan todo el proceso de comercio, de forma tal que los emprendedores que están detrás de ellas realizan tanto la compra como la venta a través de Internet. Incluso, una de las más recientes formas de comercio electrónico involucra la venta de bienes virtuales, como es el caso de los videojuegos en red, en los cuales es posible pagar por ítems o funciones adicionales que le dan mayor atractivo a la jugabilidad.
En todos los casos, es evidente que el emprendedurismo encuentra una gran ventaja gracias a Internet, y el comercio electrónico es una de varias de las excelentes oportunidades que ofrece.