Si se analizase un poco desde la perspectiva biológica sería posible el concluir que no es posible para ningún ser vivo, a excepción de algunas bacterias o la mayor parte de los vegetales, lograr algo en soledad. Desde el punto de vista filosófico, son también muchos los argumentos que respaldan lo imprescindible que resulta la vida en comunidad para el hombre y la mayor parte de las criaturas. La medicina habla de lo saludable que es el socializar y saber vivir en comunidad. La política, sociología, antropología, etnografía, economía, administración de empresas, entre muchas otras ciencias también exhortan a la comprensión de una premisa básica, que es posible sintetizar en las siguientes palabras: “No camines solo”.
En términos de emprendimiento es de igual forma relevante la interacción social, el conocer personas, diferentes culturas, ideologías, lugares y demás sustantivos que enriquezcan nuestro pensamiento y hagan más amplio el espectro de las decisiones que tomamos. Además, los equipos son uno de los instrumentos más importantes en términos de éxito emprendedor, por lo que la soledad no es algo que recomendemos.
La invitación es entonces, amable lector, líder, emprendedor y empresario en potencia es a salir y conectar con nuevas personas, formar grupos, compartir ideas e identificar aquellas personas con intereses en común, para conformar ese grupo que le conducirán al éxito… ¿Aceptas la invitación?
