¿Qué pasaría si todas las personas que en algún momento tienen una idea de negocio la persiguieran? Muchas marcas famosas o negocios millonarios empezaron con ideas que antes no existían, muchas veces nadie confiaba en ellas, pero las personas detrás de estas propuestas siguieron su visión e instinto y supieron crecer sus proyectos hasta convertirlos en grandes compañías.
Por otro lado, pocos son los emprendedores que sobresalen a tal nivel y son más las ideas que se quedan sin gasolina incluso antes de arrancar. Desafortunadamente, una de las principales razones por las que muchas ideas de negocio ni siquiera verán la luz es porque sus creadores escucharon más las voces negativas y la duda en vez de confiar en su talento para sacar un proyecto adelante.
¿Por qué es importante identificar el autosabotaje?
El primer obstáculo que un negocio debe librar es la posibilidad de que su dueño decida no sacar adelante su idea. La semilla de este problema se encuentra comúnmente en el pensamiento. Si alguna vez has tenido la idea de un negocio, probablemente te pasó alguno de estos escenarios en la cabeza, cada uno con la posibilidad de enterrar cualquier emprendimiento.
Las preocupaciones antes de invertir en una empresa propia son naturales y es casi inevitable, de hecho son necesarias para ayudarnos a tomar decisiones inteligentes y bien pensadas, gracias a la duda damos pasos con mayor cuidado, el problema es cuando estas ideas se apoderan del emprendedor y lo hacen rendirse antes de tiempo.
Ahora te decimos qué pensamientos debes detectar para evitar darles demasiado poder.
Es demasiado tarde para iniciar
Lo primero que habría que definir es: ¿Qué define cuándo es tarde: la edad, estar casado, tener hijos, estar retirado? Esto no tiene ningún fundamento ni hay una respuesta correcta sobre esta pregunta, pensar que ya es tarde para emprender es solamente una excusa para evitar arriesgarse y trabajar en una idea.
La edad y la definición de joven y viejo es subjetiva y casi irrelevante cuando se trata de iniciar un negocio. La diseñadora Vera Wang abrió su tienda de vestidos de novia a los 39 años, Reid Hoffman fundó LinkedIn a los 35 y Stan Lee alcanzó su primer gran éxito a los 39 años con la publicación de Los Cuatro Fantásticos en 1961. Estos nombres deberían recordarte que no hay una edad para iniciar un negocio, y aunque el resto de emprendedores a tu alrededor esté en sus veintes, no debe ser un impedimento para dedicarte a lo que quieres a cualquier edad.
La otra cara de la moneda es cuando alguien mayor le dice a un joven emprendedor que no debería tomar ese camino, de cualquier forma, este tipo de retos son los que definen la fortaleza de un empresario.
La tecnología necesaria es muy costosa
Contar con los elementos completos para una empresa sí puede ser costoso, pero hay que recordar que las soluciones móviles y en línea hacen mucho más fácil que los pequeños negocios puedan acceder a estos productos. Los sistemas de ventas, el manejo de inventario, los programas de diseño gráfico, las plataformas de pago y otras herramientas digitales para negocios se pueden contratar de forma accesible, lo importante es buscar proveedores no tradicionales; las empresas nuevas o startups pueden ser un buen aliado para los nuevos negocios.
Ya hay muchas empresas haciendo lo mismo
Si confías en tu producto o servicio puedes estar seguro que será un buen competidor en el mercado. Hay negocios nuevos que venden productos igual a muchos otros: ropa, comida, decoración, etc., que no están cambiando o innovando en el sector, pero que si los artículos son originales, creativos y de calidad, pueden cautivar a nuevos clientes, acompañados de una inteligente campaña de marketing y un buen manejo de las ventas.
Los comentarios son desalentadores
Es importante saber diferenciar la crítica constructiva de la envidia o la simple negatividad. Como emprendedor es importante escuchar los comentarios de los demás para tener una visión más amplia de lo que se intenta construir, pero también existen los comentarios que sólo buscan frenar el avance de los demás, lamentablemente estás palabras sólo siembran la duda en los emprendedores. A veces los comentarios pueden tener una mala intención o simplemente provienen de personas que no creen que el emprendimiento sea un camino adecuado y comparten este sentimiento con los demás.
Es tarea de cada uno saber hasta qué punto considerar las opiniones de los demás y cuándo confiar en el instinto propio. Si alguien te da un comentario negativo sobre tu idea o producto, trata de preguntar por qué tienen esa opinión, si hay algo puntual que mejorar, si han tenido malas experiencias con servicios similares; eso te ayudará a mejorar posibles fallas en tu negocio o entender si son comentarios negativos vacíos.
Mi producto tal vez fracase
Por más predicciones o estudios que realices en torno a tu producto, es el comportamiento de los clientes y los niveles de ventas los que determinarán la aceptación que tenga. Es decir, debes ponerlo en el mercado, de lo contrario, sólo tendrás una idea más que nunca se consolidó.
Hay formas de reducir el riesgo al lanzar un nuevo producto, incluso las empresas más grandes empiezan pequeño en estos temas, hacen lanzamientos con una inversión moderada, introducen un nuevo artículo o servicio, analizan la recepción por parte del público y con base en esta información deciden si vale la pena invertir más.
Recuerda que el fracaso sólo se califica como tal si no obtienes un aprendizaje que te permita avanzar después.
Ya tengo un trabajo estable
Tener un empleo no es una desventaja para emprender, al contrario, es un salvavidas y un segundo motor para iniciar el negocio de tus sueños. Encontrar el tiempo y el balance puede ser un reto y sin duda le demandará más energía a quien se encuentre en esta situación, pero el tener un empleo le da a las personas una visión más clara de cómo funcionan los negocios, qué características debe tener un líder, la cantidad de trabajo que requiere echar a andar un proyecto y la experiencia de una persona puede ser utilizada en un negocio propio.
Conclusión
Hay personas que pasan toda la vida sin encontrar una verdadera pasión hacia algo, si tú has logrado encontrar tu vocación ya llevas una gran ventaja. Incluso si las circunstancias no te ponen todo en bandeja de plata, no debes permitir que las voces negativas te arranquen la determinación de trabajar por lo que deseas.
Si nunca quitas el pie del freno no descubrirás el potencial de tus ideas. Nada puede afirmar que tu empresa será un éxito o no, pero la actitud que tengas frente a los momentos difíciles o los fracasos construirán tu modo de enfrentar los negocios y te prepararán para convertirte en un empresario más sólido.