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Así comenzarón ellos

el 14 enero 2011

Los primeros trabajos de las estrellas antes de llegar a Hollywood y alcanzar la fama mundial

La reina del pop obtuvo su corona a fuerza mucho trabajo. Eso no hay quien lo discuta. Y aunque ahora su biografía esté llena de detalles sobre una vida plagada de éxitos musicales, su primer éxito estuvo muy lejos de la música. Madonna transitaba sus primeros años de juvenil independencia y quería empezar a desarrollarse en su pasión por la música. Pero no tenía dinero. Ni siquiera cuenta bancaria. Fue entonces que se propuso conseguir un trabajo a como dé lugar. Perseverante y decidida, lo logró: la cadena de cafeterías Dunkin Donuts la contrató como empleada y ni lerda ni perezosa aprendió a fregar platos y servir café a la perfección.

Otra que dio sus primeros pasos en el mundo de los asalariados a través del gremio gastronómico fue Pink. Aunque tal vez su función no era tan simpática como la de Madonna: limpiaba los baños de Mc Donald´s. Y bueno, alguien lo tiene que hacer.

Gwen Stefani también incursionó en los fast-foods. Era empleada de la cadena de restaurantes Dairy Queen, hasta que su hermano le presentó a los miembros de un incipiente grupo musical donde podía ingresar como cantante. Se llamaba No doubt.

Julia Roberts siempre supo que su destino sería la actuación. Pero todo actor sabe que el arte per se no es redituable al comienzo. Así que la industria de la heladería pareció apetecerle a la futura mujer bonita (y tantos personajes más) y entró a trabajar en la famosa Baskin Robbins para solventar sus clases de actuación.

Otro trabajo que alguien tiene que hacer pero que probablemente nadie haya imaginado que Brad Pitt hacía de joven es el de mascota de una cadena de comida rápida. Sí. Brad Pitt era el pollo de El Pollo Loco. Para ahorrar sus primeras monedas debió disfrazarse con un gigantesco y plumífero vestuario de la caricatura que daba nombre a la marca.

Eva Longoria era osada desde niña. A los 13 años necesitaba dinero y no tuvo mejor idea que falsificar su documentación y presentarse a trabajar en el conocido restaurante de hamburguesas Wendy´s. Mucho tiempo después, en 2008, ya rica y famosa, volvió a ese local para participar de un evento de caridad.

Tom Cruise fue un poco más original. Aunque decía que quería ser sacerdote, un día se dio cuenta que necesitaba dinero. Buena presencia era el principal requisito para ser botones de un lujoso hotel y allí se lanzó a la conquista del puesto.

Fuente: http://escuelapararicos.net/se-llama-oportunidad/

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