Trabajar para uno mismo es el deseo de muchos y la idea resulta tentadora, pero iniciar un negocio no es sólo cuestión de ideas. Perseverancia, imaginación y mucha valentía son necesarias también para iniciar con éxito una carrera empresarial.
Tras años de aguantar jefes, ¿quién no ha pensado alguna vez en montar un negocio? Eso si, el verdadero emprendedor debe ser realista y saber que le espera mucho trabajo y algunos problemas.
Una herramienta fundamental
El análisis de las fortalezas, debilidades, amenazas y oportunidades son una herramienta sencilla que permite realizar un diagnóstico rápido del posible negocio, considerando los factores externos e internos que le puedan afectar.
Las Fortalezas son todas las aportaciones que el negocio puede proporcionar. Las Debilidades pueden relacionarse con las dudas, los temores y el reconocimiento de los que se llaman “puntos débiles” que tiene todo negocio.
Las Amenazas son todos aquellos aspectos externos que pueden presentarse y que podrían complicar o evitar el logro de los objetivos. Y las Oportunidades son lo contrario de las amenazas: es decir, todos aquellos acontecimientos externos que, de presentarse, facilitarían el logro de los objetivos.
Ejemplos:
+ El ingreso en un sector específico, las barreras y la reacción de los competidores.
+ La diferenciación del producto o servicio. Se trata de los elevados esfuerzos que habrá que hacer para superar la lealtad existente del cliente con la competencia.
+ Los requisitos de capital. Se necesitan recursos financieros para competir. En algunos productos, las normas para su homologación o aprobación pueden imponer situaciones críticas, que elevarán la necesidad de más capital inicial.
+ El acceso a los canales de distribución. Se puede encontrar una barrera debido al grado en que los canales están siendo previamente utilizados por empresas muy establecidas.
+ Las fuentes de suministro o los proveedores. Las empresas establecidas pueden haber contratado las fuentes más favorables.
+ Ubicación. Las empresas establecidas pueden haberse ubicado con ventaja.
+ Aprendizaje y experiencia. Las empresas sin experiencia, tendrán costos más elevados y, en la mayoría de los casos, deberán soportar pérdidas al inicio.
Por tanto, la consideración de los siguientes puntos ayudará a reconocer las Fortalezas, Debilidades, Amenazas y Oportunidades:
+ Los costos respecto a la competencia.
+ Su capacidad económica y su solvencia.
+ Derechos de propiedad intelectual y patentes.
+ Procedimientos eficientes.
+ Ventajas competitivas.
+ Satisfacción actual del mercado.
Alberto Aguelo
www.empresadehoy.com