Por José Luis Cuellar Tafur
A continuación, mostraré cómo, a través de la aplicación de la tesis planteada en la obra, esta nos lleva por dos caminos: el primero nos conduce a una preparación para el desarrollo personal y el segundo nos muestra cómo implementar los 7 hábitos en cada una de las fases de nuestra vida.
El autor nos indica claramente que el principio esencial del desarrollo personal empieza en uno mismo, lo que llevemos dentro es lo que estaremos proyectando hacia el exterior, significa esto que nuestro carácter (interno) conocido solo por nosotros, es donde debemos empezar a trabajar, en la vida actual sucede al revés, las personas trabajan la personalidad (su imagen, su expresión, etc.) y eso no está mal, si a la vez vienes desarrollando tu interior, pues es allí donde se ubican los principios, nuestra verdadera esencia, honestidad, honradez, etc.; si tu carácter se basa en principios proyectaras una personalidad positiva, amable, con la que podrás alcanzar tus metas, si por el contrario solo trabajas tu personalidad y no tienes principios te verás cómo una persona poco autentica, incongruente e incoherente y ese no es el objetivo; para eso está la fase que se conoce como la cosecha, inicia con la preparación del terreno, la siembra de una buena semilla, regarla y cuidarla para obtener un gran fruto, no podemos obtener un buen resultado si antes no nos hemos preparado para llegar ahí, la dificultad está en que solo nos enfocamos en la época de la cosecha y a partir de ahí es donde nos queremos disciplinar y trabajar arduamente, pero este gran fruto no se verá reflejado si no preparaste el terreno, si no sembraste una buena semilla, ni la cuidaste, el esfuerzo debe ser durante todo el proceso, es aquí donde nuestros paradigmas entran en acción, nuestra percepción del mundo sumada a todas las experiencias y acontecimientos vividos en cada una de las etapas de nuestras vidas nos da como resultado un modelo mental, una forma de ver las cosas, hasta este punto podemos apreciar como el autor se enfoca primeramente en la persona.
A continuación, nos adentraremos en cada uno de los 7 hábitos y su aplicación:
- Se proactivo: nos habla de cómo debemos aprender a controlar las reacciones sin dejarnos dominar por los estímulos, esto con el fin de que elijamos la mejor opcion ante cualquier condición, los estímulos pueden ser negativos o positivos la respuesta a esos estímulos puede ser emocional, racional, animal ahí es donde debemos tener el control, es un espacio muy breve de microsegundos entre el estímulo y la respuesta donde actúa el cerebro, lo podríamos llamar libertad de elección o dominio propio y esto lo ponen en práctica las personas altamente efectivas.
- Empiece con un fin en mente: ¿qué quiere decir esto? es proyectarse, visualizar cuál es tu meta, hacia donde quieres llegar, que quieres alcanzar; la primera fase es cuando lo pensamos, lo ideamos o lo soñamos, luego viene la fase de plasmarlo y hacerlo realidad; un ejemplo muy claro es la historia de los hermanos rigth, ellos imaginaron un artefacto que pudiera viajar por el aire, los tildaron de locos fantasiosos, pero ellos tenían claro su objetivo, su visión, lo proyectaron, se enfocaron en ello y empezaron a trabajar a hacer lo que sea necesario para conseguirlo; empezaron con un fin en mente, cuando sabes exactamente dónde quieres llegar depende de ti trazar el puente que te lleve al objetivo, si no tienes clara la meta, finalmente tu destino puede ser cualquiera y perderás el enfoque.
- Primero lo primero: así es, pasa muchas veces que estamos realizando una labor y creemos que hemos hecho muchas cosas, terminamos agotados y el resultado es que hicimos tareas poco productivas, tenemos que darnos cuenta que existen aspectos a trabajar mucho más importantes, que sí, requieren nuestra mayor atención, aquí es donde debemos ejecutar la matriz de lo urgente e importante. A continuación, veremos la matriz.
La mayoría de la gente vive en el cuadrante de lo urgente e importante (cuadrante 1), viven corriendo se les conoce como apaga incendios, nunca tienen tiempo para nada, las personas altamente efectivas permanecen en el cuadrante 2 donde están las cosas importantes pero que aún no son urgentes, entonces planifican, diseñan las estrategia, priorizan y optimizan su tiempo; hay una serie de actividades que son urgentes pero no son importantes como la llamada al cliente o el envío del email, para estas actividades debes ser efectivo dedicarles solo el tiempo necesario o en su defecto delegarlas, si vas a trabajar en una actividad de este cuadrante enfócate en que se realice en el menor tiempo posible; por ultimo hay actividades que no son ni urgentes ni importantes es el 4 cuadrante, hay una gran cantidad de personas sumergidas en él, son las que también viven en el primer cuadrante, saturadas y llenas de estrés, entonces de pronto llega el viernes y quieren mandar todo al carajo, se van de fiesta, desperdician el fin de semana y cuando llega el lunes lo que estaba en el cuadrante 2 y 3 ha pasado al cuadrante 1 urgente e importante y vuelven a su infierno. - Piense en ganar-ganar: generalmente estamos pensando en cómo sacar más provecho a la hora de una negociación, crecimos con ese paradigma de que si yo gane alguien perdió o viceversa, que si llego primero puedo tomar más, obtener ventaja y arrebatar la parte que le corresponde a otros, este es un concepto equivocado pues las bases de estas negociaciones serán frágiles, cortas en el tiempo y posiblemente terminen de una forma dificultosa; si por el contrario logramos establecer relaciones ganar-ganar y por difícil que parezca, buscas, trabajas y diseñas un modelo de estrategias en conjunto que permitan que ambas partes obtengan lo mejor de la situación, mantendrás unas muy sólidas y excelentes relaciones en todos los aspectos de tu vida.
- Procure primero comprender y luego ser comprendido: la naturaleza del ser esta enseñada a ser comprendida y nos la pasamos argumentando y así mismo hacen los demás con el fin de ser comprendidos, esto genera un choque sin sentido, una barrera que no conlleva a ningún buen resultado, el secreto para evitar esta situación está en el saber escuchar, pues es ahí donde logramos entender que quiere el otro, a que le teme, cuál es su visión; entonces detente, haz un momento de silencio, fíjate en la persona integralmente, que dice, como lo dice, que gestos hace. Cuando eso pasa, la barrera se cae, se bajan las guardias, cambia el tono de la discusión y empiezas a descubrir que posiblemente tienes mucho en común con el interlocutor, la otra persona se va a sentir relajada, importante, incluso hasta con algo de pena y va a querer que te sientas igual y ahí es donde ambos pueden ser comprendidos y poner en práctica este quinto habito.
- Sinergia: es ir más allá de la suma, conocer al otro, acoplarse con el otro entender donde es bueno el otro, hacer una división optima del trabajo de acuerdo a las habilidades de cada uno y así centrarse en dar lo mejor de ellos para lograr los objetivos, hacer efectiva la frase que dice ¨el todo es más que la suma de las partes¨ enfocarse en sacar a relucir lo mejor del equipo, potenciar las fortalezas, disminuir las debilidades y conseguir resultados extraordinarios.
- Afilar la sierra: somos la sierra, nos pasamos gran parte de nuestra vida cortando y cortando árboles, trabajando como locos enfocados en un resultado y cuando llevamos una gran cantidad de árboles cortados nuestra efectividad comienza a disminuir, hemos descuidado nuestra humanidad, entonces llegan los malos resultados, la frustración, el cansancio y te preguntas ¿qué pasa?, es el resultado de no afilar la sierra, de no ejercitarnos, de no cuidarnos, de no descansar, no alimentarnos bien, no dedicar tempo para encontrase consigo mismo y con la familia, de no estudiar. Este tiempo que te debes brindar lo debes usar de forma estratégica, esto te dará los recursos y herramientas necesarias para renovarte, recargarte y empezar cada nuevo proyecto con mucha más energía.
En conclusión, lo que el autor pretende es que trabajemos en un cambio, un verdadero cambio que no llegara a nuestra vida por arte de magia, requiere tiempo, esfuerzo y dedicación, es necesario borrar el casete, formatear una parte de nuestro cerebro, volver a nacer en ciertos aspectos de nuestra vida y aunque parezca difícil empezar de cero, si tenemos claro lo gratificante del resultado y la maravillosa recompensa, sabremos que este esfuerzo valdrá la pena.
Bibliografía:
Covey, Stephen R. (2006). Los 7 Hábitos de la Gente Altamente Efectiva, Programas Educativos S. A. de C. V., edición Paidós mexicana S. A México D.F, pp 368