Como emprendedores, empresarios, y amantes de los temas símiles es necesario tengamos en cuenta para hacer más efectivo nuestro accionar, casos desarrollados en escenarios distintos, que luego de analizados pueden tornarse una excelente oportunidad de negocio, al ser emulados para nuestros territorios.
El emprendimiento ecológico o eco-emprendimiento se alza como tendencia a nivel mundial y gran parte de las empresas nacientes en los diversos lugares del mundo, apuntan al logro de un equilibrio entre la solidez económica y la sostenibilidad ambiental. Tres son los ejemplos que traemos del tema en mención para usted amable lector…
MakeyourT (dedicada a la creación de marcas de camisetas) que no es una empresa necesariamente perteneciente al sector ambiental, tiene muy claras políticas para promover el cuidado de la naturaleza como lo son la gestión correcta de sus residuos sólidos, el uso de un sistema de líquidos a diferentes niveles y la buena definición de sus procesos de reciclaje de plásticos y cartón. Su fundador Ángel Fernández afirma que este tipo de prácticas pueden resultar costosas (él invierte en ello alrededor de 15.000 euros anualmente), pero que siempre vale la pena. Aparte de eso la empresa genera la credibilidad que, en términos de marketing, resulta muy importante.
El segundo caso es Mensos, empresa con una interesante propuesta, consistente en realizar mensajería en bicicleta. Claramente el impacto negativo ambiental que produce su compañía es mínimo y la política ambiental es evidente.
Mensos es una empresa que comenzó con un capital de 6.000 euros, y que crece a buen ritmo gracias a la excelente gestión de su fundador Alejandro Corroto, quien se ha aventurado a algo que se vislumbra complejo; siendo este un claro ejemplo de la osadía como rasgo característico de los emprendedores.
El último ejemplo es Santiago Cuerda, creador de Huertos Compartidos; empresa que promueve la creación de cultivos en casa a través de la asesoría respectiva; propuesta muy interesante al tiempo que retadora; pues busca de alguna manera reducir el monopolio de la grande y polémica Monsanto.
Son estos tres casos claro ejemplo de que se puede lograr el balance entre consciencia ambiental y estabilidad económica por medio de proyectos de emprendimiento. Debido a ello los hemos considerado hoy dignos de mención pues de seguro estos amigos españoles resultarán inspiración para muchos latinos que actúan en la procura de consolidar ideas similares.
¿Conoces otros casos de emprendimiento ecológico que podamos destacar?