Tener un negocio de venta de productos de tecnología como teléfonos móviles, gadgets, u otro tipos de dispositivos tienen a favor el tener una gran demanda de consumidores que están dispuesto a gastar su dinero en lo «ultimo» del mercado. Pero luego aparecen nuevos dispositivos que pueden hacer cambiar los patrones de compra del consumidor. Una de estas nuevas tendencias son los artículos wearables, nos referimos a los smatwatches y las pulseras inteligentes.
Nuevos artículos están apareciendo en el mercado tecnológico: Drones, smartwatches, pulseras inteligentes, etc. Casi todas las grandes empresas se están sumando a la moda de estos dispositivos, un ejemplo de ello es Apple con su Apple Watch.
El Apple Watch es el ejemplo del producto que tiene que crear una compañía si o si, ya anteriormente Sony, Samsung o LG habían apostado por los smartwatches, y los de Cupertino no se podían quedar fuera del mercado. Parece que su apuesta no ha salido todo lo bien que querían, por diferentes motivos, pero ya son más de 1 millón de Apple Watch los que se han vendido (y solo se puede hacer compra online, y en determinados países).
Otro ejemplo de lo anterior son las pulseras inteligentes, grandes marcas como Nike, Microsoft o Xiaomi ya tienen una smartband en el mercado para tener contentos a los usuarios que demandan este tipo de productos tecnológicos.
¿Qué deben de hacer los comercios tecnológicos?
La verdad que la respuestas no es sencilla. Para este año 2015, los expertos esperan un incremento de más del 700% de ventas de artículos wearables, respecto al año anterior; aún no se tienen datos de ningún estudio que los puedan corroborar este dato. Con la aparición del Apple Watch, o el nuevo reloj de Pebble seguramente estos datos sean correctos. Pero, ¿el comercio electrónico debe de volcarse con la venta de estos dispositivos…?
En mi opinión aún es un mercado muy poco maduro, con grandes posibilidades de éxito pero también grandes posibilidades de fracaso. Quizás lo mejor sería esperar al siguiente año y ver la evolución del mercado respecto a estos dispositivos, aunque si te gusta el riesgo puede ser una buen punto de partida.
El futuro marcará si los dispositivos wearables tienen recorrido para ser un producto de consumo mayoritario, o no; por ahora, todo es incierto respecto a estos artículos.