Los últimos años han posibilitado la consolidación de internet como un miembro más en gran parte de los hogares del mundo; ofreciendo a sus miembros contenido informativo ilimitado y un sinfín de opciones de formación gratuitas. Cursos de todos los tipos, con todos los nombres, temáticas, mezclas entre ciencias que dan lugar a otras pseudo-ciencias – muy útiles para un significativo número de personas- que conducen poco a poco a ese momento en el que van a existir especialistas, inclusive en los temas más específicos y jamás pensados: Especialista en cuidado de las pestañas, en limpieza de patatas, en elaboración de muñequitos de plastilina, entre muchas otras actividades en las que, producto de las cuasi-infinitas alternativas gratuitas de formación que ofrece la internet, de seguro tendrán lugar en nuestra sociedad, dando lugar también a la creación de nuevas y muy puntuales necesidades.
Puede que se le haga un poco enredada mi explicación por lo que diré que a lo que hago referencia es a que la sociedad atraviesa un momento que le acerca a ese en el que cualquier conocimiento será de gran utilidad. La especialización se hará necesaria a niveles exagerados y ahí existirán entonces nuevas oportunidades de negocio.
Un ejemplo de la temática en mención son las numerosas y – para muchos extrañas- nuevas necesidades que han surgido en esta época y que representan una oportunidad de lucro para los emprendedores como lo son el cuidado de las uñas de los pies, las axilas, la zona íntima, los fetiches sexuales, adicción al tabaco, el hecho de que se perdiese el control del tv y otras que componen esta larguísima lista; conducentes a la generación de productos que satisfagan eso que antes era propio de los excéntricos y hoy lo es de la sociedad en general.
“Todo representa una oportunidad de negocio” Es la conclusión a la que pretendo se llegue luego de analizar las presentes palabras. Cada cosa sobre la que posea usted conocimiento, amable lector y emprendedor en potencia, puede ser convertida en producto o servicio y posteriormente en una empresa que se encargue de multiplicarlo y llevarlo hasta cualquier persona sobre la tierra que lo requiera. Entonces no es para nada loco pensar que mañana veamos exitosas empresas ofertantes del servicio de cuidado de pestañas o limpieza de patatas y venta de muñequitos de plastilina. O tal vez MBA, Especializaciones, Pregrados y demás cursos en tales áreas.