¿Quién alguna vez no se ha sentido derrotado, sin ganas de continuar y mucho menos, sin fuerzas para volver a emprender? Si tuvieras que recordar esos momentos, creo yo, que ambos derramaríamos muchas lágrimas…
En mi carrera como joven emprendedor he pasado por muchos de estos avatares y, sabiamente, mis formadores han sabido orientarme para no solo sobrellevar el problema, sino para darle solución y superarlo.
Hoy te quiero compartir 5 pasos elementales para poder eliminar y arrancar de raíz, toda secuela que halla dejado una caída en tu vida. ¡Ahí vamos!
1. Ser Sincero contigo mismo
Aquí es donde inicia todo. Se trata de reconocer en que te equivocaste. Es muy fácil tratar de buscar culpables y decir que el mundo tuvo la culpa de ese fracaso. Pero en verdad, si hoy analizas con discernimiento agudo, encontrarás que en mucho de ello, Tú fuiste culpable de ello. ¿Parece acusador?… pero es la verdad.
Esto te servirá para hacer un propósito con tu historia como emprendedor. Es aquí donde nace esa conocida frase “Uno aprender de los errores”... Pero OJO, solo recibirás esa enseñanza, si antes eres sincero contigo mismo.
2. Dejar ir al resentimiento
Que fundamental es esto. Hay una frase que dicen algunos “Te perdono pero no lo olvido” Sin en verdad deseas emprender algo verdaderamente nuevo, empezar resentido: Es una mala idea.
Aquí cabe mencionar algo que no dije en el primer paso, que es “Perdónate a ti mismo”. Dicen que uno da lo que tiene. Y si aún en ti existe un sentimiento de culpa por lo que pasó o dejaste pasar, difícilmente podrás dejar ir al resentimiento.
3. Reemplazar los malos recuerdos por otros buenos y aún mejores
A veces dañamos tanto nuestra mente, que la bombardeamos con recuerdos que, siendo sinceros, ya no valen la pena. Aquí entra a tallar el optimismo que uno le pone para superar ese fracaso. La manera más eficiente de empezar, es llenarnos de pensamientos positivos, nuevos sueños, ganas y mucha confianza en volver a emprender.
4. Concéntrate en el futuro, deja el pasado
Walt Disney decía: “Si se puede soñar, se puede hacer” !Ánimo mi amigo¡ es hora de empezar a cambiar paradojas. Recuerda que una cualidad muy predominante en todo emprendedor es ello “EMPRENDER”, pero sin miedos, con un corazón aventurero que va a lo seguro. Somos gente osada, atrevida y muy capaz… y bueno en todo ello, el pasado sobra.
5. Comparte tu experiencia con los demás
Siempre digo que la vocación del Emprendedor es universal, lo que pasa es que existen muchas personas que tienen a ese León dormido y necesitan de alguien que despierte a ese gigante, y para ello… estas Tú. Enseña con tu experiencia, sea poca o amplia, pero que sea sincera y que busque siempre el bienestar común. No te quedes con todo esa enseñanza ahí adentro, hay muchos que la necesitan…
Un saludo fraterno y recuerda:
Levántate cuántas veces caigas, ¡pero nunca te quedes ahí!