Si tienes una idea de negocio rondando tu cabeza, escúchala y dale forma, no todos los que desean emprender encuentran tan fácilmente ese primer empujón como es esa idea inicial, no la desaproveches. Como buen emprendedor, antes de ponerte en marcha y dar a conocer tu negocio al resto, debes tener presentes una serie de recomendaciones:
Tu experiencia es la clave: En muchas ocasiones la experiencia es un factor determinante en el transcurso y maduración de nuestro futuro modelo de negocio. Haber trabajado en el mismo sector empresarial en el que deseas desarrollar tu idea te abrirá muchas puertas y te permitirá avanzar de una forma más ligera sobre esos terrenos pantanosos como son las relaciones comerciales, los precios y demás factores específicos que si los desconocemos, nos podrían provocar un tropiezo importante.
Tu propia personalidad: Bien es sabido que algunos nacen con vocación emprendedora, otros la tenemos que desarrollar más tarde. Nuestras inquietudes por la innovación o el cambio nos pueden ayudar en gran medida a continuar, influye mucho la actitud y los hábitos de cada individuo. Una persona extrovertida, constante y dispuesta a improvisar o cambiar el rumbo en momentos de confusión, tendrá mucha ventaja.
Emplea la Tormenta de Ideas: Esta técnica fue inventada por Alex Osborn en los años 30, se emplea mucho en el sector empresarial y permite ofrecer una auténtica tormenta de ideas para el negocio de la forma más simple. Reúnete con tu equipo o todas aquellas personas que tengas en cuenta para desarrollar tu idea emprendedora, plantea el problema al resto y que ellos comiencen a aportar ideas que puedan ayudar a ese problema, esas ideas desembocarán en otras y así sucesivamente hasta que se realice una selección de las mejores. Esto potencia la imaginación del grupo, un arma muy potente.
Innovación y cambio: Continuamente oímos hablar de aplicar las nuevas tecnologías en nuestras ideas para poder mejorar algo que ya existe, a esto le denominamos Innovación. Tendremos que observar el mercado, y una vez tengamos definido el producto o servicio que vamos a ofrecer, podremos adaptarlo a las nuevas necesidades del mercado. La creatividad será la clave.
Intraemprender: Este nuevo concepto nos puede ofrecer un nuevo foco de generación de ideas. El sistema es simple y solo se desarrolla cuando ya estamos realizando el trabajo, es decir, son ideas que se originan de las ideas previas gracias al trabajo que se va generando en el día a día, esto te permite ofrecer otro enfoque y crear una nueva unidad de negocio.