Hoy te acercamos un post que sale de la experiencia y la reflexión con muchos de nuestros clientes: autónomos y pymes principalmente. Somos Netasesor, una asesoría online centrada en ofrecer asesoramiento fiscal, contable y laboral a este tipo de empresas.
Emprender no es fácil, a pesar de lo que muchos quieran hacer parecer. Son muchas las empresas, pymes y autónomos en su mayoría, las pese a las ayudas ofertadas, se hunden apenas han comenzado su andadura. La crisis no ayuda, es cierto, pero también lo es que en este contexto de recuperación las oportunidades pueden y deben llegar. Solo hace falta tener el enfoque adecuado.
Por eso, hemos decidido lanzar este post recién inaugurado el año por si andas pensándotelo. Para ello, hemos rebuscado en algunos blogs de emprendedores famosos (y otros no tanto) y también hemos tirado de cosecha propia. En estos puntos encontrarás algunos consejos útiles (o por lo menos a nosotros nos lo parecen):
- Focaliza tu pasión. Ten en cuenta que vas a vivir muchos malos momentos y si no estás motivado haciendo algo que realmente te gusta, habrá muchas más posibilidades de que tires la toalla para siempre. De hecho, muchos CEO’s de importantes empresas toman la frase “Haz lo que te gusta, el resto vendrá solo” como bandera.
- Busca un mentor. Te animará aunque el crecimiento de tu empresa sea muy lento y no te dejará caer en el desánimo. Intentará evitar que caigas en sus errores y además, te ayudará a diseñar y seguir un plan. Incluso cuando tus clientes no te paguen y no tengas suficiente liquidez.
- Invierte con sentido. Mejor que generar muchos ingresos, es gastar en lo que creas que te será rentable. Y olvídate de falsos profetas.
- Tu estrategia digital. Si tu empresa es «normal» puede vender servicios o productos online a España y a cualquier parte del mundo. Esto no es fácil, aunque el planteamiento de una estrategia digital no sea algo realmente complicado. Un web donde han de llegar potenciales clientes, que una vez convierten han de ser fidelizados y prescriptores de nuestros productos y/o servicios en redes sociales. Ahora, todo esto debe ir apoyado en una sólida estrategia de medición y analítica web.
- La liquidez es la estrella de tu firmamento. Procura que al menos al principio, las empresas paguen puntualmente. Más vale proyectos pequeños que te ayuden a salir adelante que faraónicos objetivos y proyectos que cobrarás cuando hayas tenido que cerrar tu empresa porque no has sido capaz de hacer frente a todos los pagos, ni tampoco has podido asumir otros trabajos porque estabas muy ocupado en uno gigante cuyo cliente te pagará en dos años.
- Contrata con cabeza (si es necesario). Puede que te asuste tener que contratar gente, dejar tu valiosísimo negocio en manos de desconocidos que según te parece a ti, no mirarán por la empresa tanto como tú. Bien, tómate tu tiempo para contratar la persona perfecta y sobre todo, contrata personas que hagan lo que tú odias hacer. Y que adoren hacer estas tareas. Así, todos os dedicaréis con pasión a lo que más os gusta.
- Peligro: zona de confort. Tu zona de confort está directamente relacionada con tu fracaso en la empresa. No importa si llevas mucho tiempo haciendo algo, simplemente, dedícate a ello como si fuera el primer día. Nunca se deja de aprender.
- Partner. Colaboradores eventuales pueden ser una buena solución para traer esa dosis de talento extra que tú y tu empresa necesitáis. Eso sí, tenéis que dejar muy claro cuáles son las expectativas y valores. Queda con estas personas, aun incluso si en un primer momento pudieran ser competencia. Siempre es bueno compartir puntos de vista y fomentar el encuentro.
- Ley de Murphy. Como decía la ley de Murphy, todo lo que pueda salir mal, saldrá mal. Es mejor estar preparado. Es cierto que eso conllevará un gasto de energía extra pero te alegrarás de tener un plan de actuación. De todas maneras, como es imposible estar preparado para todo, rodéate de personas que tengan mucha experiencia. A ellos seguro que les ha pasado algo parecido.
- Vive. Recuerda que el trabajo y los negocios no son más que un medio de vida, y que cuando dejas la vida atrás, te olvidas de lo más importante. Identifica tus valores y prioridades, recuerda que es compatible tener una empresa y a la vez, vivir la vida que amas. Y sobre todo, que las personas que puedes dejar atrás son las que te apoyarán en los peores momentos y las que además, siempre te ayudarán a sobreponerte. En todos los sentidos.
- Confía en ti. Y además, elimina el ruido de los demás. Si crees que tu idea puede ser una buena idea, sigue tus instintos y tu pasión. Procura que sea brillante, porque vivimos en un mundo lleno de ruidos donde tendrás que atraer la atención de tu potencial cliente.
- Y sobre todo, no sigas ningún consejo si crees que va en contra de tus intereses o tus creencias. Esto se aplica a todos los anteriores :). Ya en serio, lo mejor es que te dejes aconsejar, pero que tomes las decisiones siempre tú y siempre teniendo en cuenta tu filosofía. Nunca te arrepientas de una decisión que tomaste sopesándola y es peor creer que fracasaste por no ser fiel a ti mismo que fracasar por seguir tus convicciones. Al fin y al cabo, puedes controlar el mundo.
Estos son algunos de los consejos que hemos seleccionado para aquellos que piensan ahora en emprender. Los emprendedores, a buen seguro que saben de lo que estamos hablando. Por supuesto te recomendamos que visites especialistas y contrates una asesoría online para que ellos solucionen el papeleo y toda la burocracia (es bastante, creénos) y mientras tanto, tú te dediques a poner en pie tus proyectos.