Era el año 2008, el mundo vivía una aparente calma hasta que explotó una crisis financiera sin precedentes. Este hecho no sólo evidenció la fragilidad del sistema económico, sino el enorme grado de corrupción en el que habían caído y del que eran parte sus integrantes: llámense bancos, aseguradoras, calificadoras y, por qué no decirlo, instituciones gubernamentales de diferentes países.
En ese momento el mundo comenzó a entender que era necesario encontrar alternativas de financiación; soluciones alejadas de las viejas instituciones que devolvieran la confianza a las personas y que, a la vez, dejaran de verlas únicamente como consumidores de servicios financieros. Fue entonces que comenzaron a surgir propuestas y una de ellas fue el crowdfunding o la financiación colectiva.
Originalmente, el crowdfunding nació como una herramienta utilizada a nivel artístico para financiar obras artísticas, de ahí que muchos lo hayan llamado como micromecenazgo. Un sistema en el cual el artista que recibía los fondos o donaciones otorgaba a cambio recompensas en especie a sus “mecenas”.
No obstante, la evolución que ha tenido el crowdfunding ha hecho que ese término se haya quedado mucho muy alejado de su actual potencial y realidad. Para muestra, actualmente es posible financiar un proyecto empresarial mediante el crowdfunding o la financiación colectiva. Existen dos opciones:
- Préstamos participativos, donde el emprendedor solicita una cantidad que deberá restituir a sus inversores junto con un interés o la venta de participaciones.
- Aumento de capital por participaciones, donde el emprendedor solicita una cantidad a cambio de un porcentaje de las participaciones de su compañía. Con lo cual se compromete a retribuir utilidades a sus inversores en función al capital que ellos hayan aportado.
Al momento, Creoentuproyecto.com es la única plataforma en ofrecer ambos sistemas entre las plataformas españolas e hispanoamericanas. Ya que por lo general, existen otras plataformas que ofrecen el sistema de préstamos o el de participaciones.
En los países del norte de Europa y en Estados Unidos esta forma de financiación es una opción real, que cada día abrazan más y más personas. Prueba de ello es que el valor total del mercado a nivel mundial en 2012 donde alcanzó la nada despreciable cifra de 2,000 millones de euros. No obstante, según InfoCrowdsourcing hasta el momento la participación de España y Latinoamérica es “simbólica” ya que a pesar de haber 62 plataformas, (47 de ellas en España), el valor de este mercado combinado fue de apenas de 15 millones de euros.
A pesar de ello, los pronósticos de crecimiento para el sector son muy promisorios. El mismo Banco Mundial reconoce que “este mercado podría alcanzar el valor de los 300,000 mil millones de dólares en los años venideros si los gobiernos realizan los cambios jurídicos pertinentes”.
El Banco Mundial no es el único en reconocer el potencial del crowdfunding, pues ya hay grupos financieros que lo ven como una amenaza a sus intereses. BBVA, en su reporte del panorama económico para el segundo trimestre de 2013 en Estados Unidos, alertó que «el crowdfunding podría convertirse en la fuente principal de servicios financieros para las nuevas generaciones». Y va más allá, pues sugiere a los bancos “invertir en el modelo disruptivo, mantenerlo aislado de los negocios primarios”. Además de crear sus propias plataformas para comprender el entorno y “comprender las necesidades del mercado que no han sido capaces de llenar”.
No hay mayor ciego que el que no quiera ver, hoy en día el crowdfunding o la financiación colectiva es una realidad, una alternativa de financiación para el presente y el camino a seguir en el siglo XXI.
Estudio Banco Mundial: http://goo.gl/qas45d
Estudio InfoCrowdsourcing: http://goo.gl/yN1LPG
Estudio BVVA: http://goo.gl/IdGSkV
Aporte de Mario González
Creoentuproyecto.com